Rusia ha acusado este viernes a Ucrania de atacar con misiles varios depósitos de combustible a las afueras de la ciudad rusa de Bélgorod, muy cerca de la frontera entre ambos países.
El ataque ha provocado el incendio de varios depósitos de combustible, al menos ocho, y cada uno de ellos con una capacidad de 2.000 metros cúbicos. El supuesto ataque ucraniano no ha producido víctimas, según ha confirmado el gobernador de Bélgorod, Viacheslav Gladkov.
Según publican varios medios rusos, dos helicópteros ucranianos lanzaron los misiles a baja altitud para no ser identificados por los radares rusos. Entraron en el espacio aéreo ruso y, después, regresaron a Ucrania.
De ser así, sería el primer ataque aéreo por parte de Ucrania en suelo ruso desde el inicio de la invasión el pasado 24 de febrero. Sin embargo, el Gobierno ucraniano no ha confirmado la autoría de este ataque. También sería el primer bombardeo aéreo en Rusia desde la Segunda Guerra Mundial.
Este suceso tiene lugar dos días después de que la ciudad de Bélgorod fuera escenario de varias explosiones en un almacén de armas, sin que se conozcan las causas. Por su parte, las autoridades de Ucrania no se han pronunciado por ahora ni han confirmado estar detrás de un ataque contra el almacén de combustible.
No hay heridos
Desde el Gobierno ruso aseguran que la explosión ha provocado heridas en dos trabajadores, sin embargo, la petrolera rusa Rosneft, propietaria del depósito de combustible, confirma en un comunicado que nadie resultó herido en el incendio.
"Existe el riesgo de que el fuego siga propagándose", apunta la agencia oficial rusa TASS, que precisó que el territorio del depósito de petróleo alberga un total de 27 tanques.
El Ministerio para Situación de Emergencia de Rusia informó de que en las labores para sofocar el fuego participan unos 170 bomberos y carros extintores.
Bélgorod se encuentra a unos 30 kilómetros de la frontera con Ucrania y a unos 70 kilómetros de Járkov, la ciudad más importante en el este ucraniano, asediada en la invasión de Ucrania por parte de Rusia el pasado 24 de febrero.