Un policía dispara con una pistola táser a un director de orquesta negro porque no dejaban de tocar

El vídeo huele a repetido. A otro caso más de abuso policial. Y a otra historia más con tintes racistas. Según se puede ver en unos segundos grabados por con un móvil, agentes de Birmingham (Alabama, EEUU) utilizan una pistola eléctrica para detener a un director de orquesta afroamericano. Este se había negado a ordenar a su banda de música de instituto que dejara de tocar durante un partido de fútbol americano.

La Policía se encuentra actualmente investigando el suceso. Según declaró este martes Juandalynn Givaneste, congresista afroamericana del parlamento estatal de Alabama y abogada del director de orquesta, este episodio constituye un "alarmante abuso de poder" y no debería haber acabado en violencia.

La grabación, que se hizo pública el lunes por la noche, muestra la secuencia completa: los policías piden al director, Johnny Mims, que acabe de tocar. Él no dice nada a la banda, que sigue con su música. Le avisan de que van a arrestarle. "Vais a la cárcel", se escucha. Él lo afirma y sigue mirando a su orquesta mientras se ve detrás el campo de rugby donde juegan algunas personas.

Solicitan en varias ocasiones que detenga la música y que los estudiantes abandonen el estadio. Mims hace caso omiso y sigue dirigiendo a la banda. En un momento dado, responde a uno de los policías: "Quítate de mi vista". Inmediatamente, Mims indica a los agentes que la banda se está preparando para retirarse y que la canción que están interpretando es "la última".

Los policías, no obstante, amenazan con arrestarlo o con contactar con la escuela. El director de orquesta muestra indiferencia. En un momento dado, uno de los policías decide detener al director de orquesta y ordena: "Ponle las esposas". Hay un forcejeo que ya se registra con movimientos bruscos de la cámara. 

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Formándose un tumulto alrededor, la música se interrumpe y se desata el caos. En ese momento, un policía utiliza una pistola eléctrica para paralizar a Mims. Es un arma conocida como táser, que puede dar descargas eléctricas de hasta 50.000 voltios y que provoca contracciones de los músculos con el objetivo de inmovilizar al sujeto. Según Givan, más de 140 estudiantes estaban presentes y, en el vídeo, se pueden escuchar sus gritos durante el arresto.

El Departamento de Policía de Birmingham justifica el arresto alegando que Mims había cometido delitos de conducta desordenada, acoso y resistencia a la autoridad. Mims, sin embargo, pudo salir en libertad condicional tras pagar una fianza. Los cargos en su contra están ahora siendo evaluados por la división de asuntos internos del Departamento de Policía de Birmingham, encargada de esclarecer lo ocurrido, según han adelantado varios medios.

Otros casos parecidos

Muchos testigos de esta actuación han criticado a la policía. La crudeza de sus actos evoca a otros casos parecidos. Algunos han ido exponiendo la violencia policial contra la comunidad negra en Estados Unidos. Uno de esos ejemplos fue el de George Floyd en mayo de 2020.

Entonces, un policía blanco de Mineápolis (Minnesota) asfixió con su rodilla a este afroamericano y desató las protestas más numerosas contra el racismo desde el asesinato de Martin Luther King Jr., a finales de la década de 1960. Además, afloró el eslogan de Black Lives Matter.