Cuba revela la identidad de un agente encubierto para neutralizar las protestas del próximo 15-N
Cuba envió a España en 2019 a uno de sus agentes encubiertos para recabar información sobre el dramaturgo Yunior García, líder opositor que encabeza las marchas convocadas para el próximo lunes 15 de noviembre.
3 noviembre, 2021 01:28Noticias relacionadas
- Cuba recluta a cientos de jóvenes para prevenir nuevas protestas contra el régimen de Díaz-Canel
- El bloqueo a Cuba: historia de una excusa recurrente para justificar una dictadura atroz
- El cinismo de Díaz-Canel: "¿Dónde está la represión cubana? ¿Dónde están los desaparecidos?"
- Crisis económica, pandemia y redes sociales: las claves que auparon las protestas en Cuba
- "Abajo la dictadura": los cubanos protestan contra el Gobierno en la marcha más grande desde 1994
Cuba envió a España en 2019 a uno de sus agentes encubiertos para recabar información sobre el dramaturgo Yunior García y otros opositores participantes en un evento que estuvo auspiciado aquel año por la filial en Madrid de la Universidad norteamericana de Saint Louis.
Yunior García es uno de los impulsores de la marcha opositora que está prevista para el próximo 15 de noviembre en la isla y que las autoridades cubanas han prohibido, por considerar que sus promotores tienen la intención de impulsar un cambio de régimen. Y porque algunos tienen vínculos con Washington, según un comunicado oficial emitido este martes.
El Gobierno cubano divulgó la información en un vídeo donde revela que el doctor Carlos Leonardo Vázquez González era el espía 'Fernando' del Departamento de la Seguridad del Estado, el órgano de inteligencia y contrainteligencia del país.
'Fernando' reveló su identidad para denunciar la participación de Yunior García Aguilera en el citado evento y así "desmontar" los supuestos propósitos subversivos de la marcha pacífica convocada por el líder del grupo online disidente 'Archipiélago' y otros jóvenes para el 15 de noviembre.
El espía cubano acudió al encuentro de 2019 en Madrid, que, según las autoridades, abordó el papel de las Fuerzas Armadas en un proceso de transición en la isla, con la asistencia entre otros del expresidente del gobierno español Felipe González (1982-1996).
El agente cubano argumenta en el vídeo que "Yunior está buscando la confrontación con las Fuerzas Armadas y el Minint -Ministerio del Interior-" y asegura que "no es tan transparente y sus acciones no son aisladas, ni espontáneas".
No es la primera vez que el gobierno muestra públicamente conversaciones telefónicas privadas de García Aguilera o lo vincula a "elementos de la mafia anticubana de Miami" y legisladores de EEUU para desacreditar la iniciativa de marchar pacíficamente exigiendo derechos políticos.
Los derechos de huelga y manifestación raramente se contemplan fuera de las instituciones estatales y nunca se ha autorizado un acto opositor al Gobierno en Cuba.
Se mantiene la marcha
Los miembros de la plataforma virtual 'Archipiélago' mantienen la convocatoria de la marcha en La Habana y otras ciudades del país el 15 de noviembre, pese a la prohibición del Gobierno que la considera "ilícita" y responde a un "cambio de régimen".
Sobre ellos pesan también amenazas de la Fiscalía que ha advertido de "consecuencias legales" si mantienen su plan, algo que ha generado un fuerte rechazo entre los activistas opositores y en las redes. Pueden incurrir en delitos como desobediencia, manifestaciones ilícitas e instigación a delinquir y otros, penados con sanciones económicas y privación de la libertad de tres meses a un año.
García Aguilera, uno de los arrestados el 11 de julio cuando estallaron las masivas protestas antigubernamentales, insiste en su derecho "y el de todos los cubanos a manifestarse pacífica y cívicamente".
La marcha demanda el respeto a los derechos, la liberación de los presos políticos y la solución de las diferencias a través de vías democráticas y pacíficas. Reclama el ejercicio de los derechos de reunión, manifestación y asociación con fines lícitos y pacíficos establecidos en la Constitución.
Sin embargo, las autoridades interpretan que un derecho constitucional "no puede ejercerse en contra de los demás derechos, garantías y postulados esenciales de la propia Constitución, lo que determina el carácter ilícito de la marcha".