El ministro de Economía y precandidato presidencial argentino, Sergio Massa, el pasado 19 de julio.

El ministro de Economía y precandidato presidencial argentino, Sergio Massa, el pasado 19 de julio. Reuters

América

Massa acelera un acuerdo con el FMI para no agotar las reservas de Argentina y fortalecer su candidatura

El actual ministro de Economía busca modificar el acuerdo vigente "a todo vapor" para llegar con fuerza a las primarias el 13 de agosto.

24 julio, 2023 03:18

Argentina se apresura a negociar un acuerdo inminente con el Fondo Monetario Internacional antes de que el Banco Central agote sus reservas. El ministro de Economía, Sergio Massa, que también concurrirá a las primarias como candidato del peronismo, envió una delegación a Washington la pasada semana para conseguir ajustar el acuerdo vigente. Con las adaptaciones que pide, Massa conseguiría frenar el desplome de las reservas, lo que sería un buen colofón de cara a los comicios el 13 de agosto.

El actual presidente, Alberto Fernández, secundó el propósito de Massa el viernes tras reunirse con Kristalina Georgieva, directora gerente del FMI. En una entrevista citada por Efe, afirmó que su Gobierno trabaja "a todo vapor" para llegar a un entendimiento con el organismo. "Yo estoy particularmente involucrado en la negociación. Tengo la esperanza de que vamos a poder ponernos de acuerdo, ordenar las cosas y seguir adelante", dijo.

Un pacto entre la Casa Rosada y el FMI supondría cambiar ciertos términos del acuerdo de refinanciación firmado en marzo de 2022. En principio, Argentina pide flexibilizar las metas fiscales, monetarias y de acumulación de reservas, además de adelantar los desembolsos trimestrales estipulados en el acuerdo de facilidades extendidas, que permitió refinanciar deudas por 44.000 millones de dólares.

[Sergio Massa consigue unir al peronismo (al menos en foto) y Cristina Kirchner lo bendice como candidato]

Los desequilibrios macroeconómicos y la severa sequía que impactó de lleno en sus exportaciones agrícolas ―su principal fuente de ingresos― han hecho que Argentina haya tenido difícil llegar a los objetivos acordados el año pasado con el Fondo. Pero de su cumplimiento depende la salida de un círculo vicioso: sólo si Argentina satisface los requisitos, recibirá los fondos del FMI que el país necesita para pagar su deuda de 3.400 millones de dólares con el propio organismo.

Buenos Aires debe efectuar el desembolso antes del 1 de agosto, por lo que las negociaciones son contrarreloj. En este escenario, son crecientes los rumores de inminentes anuncios de medidas en el ámbito cambiario, que posiblemente frenarían la salida de reservas por la vía de importaciones e incentivarían la liquidación de exportaciones.

Sergio Massa en un acto en la sede de la Confederación General del Trabajo, el 19 de julio en Buenos Aires.

Sergio Massa en un acto en la sede de la Confederación General del Trabajo, el 19 de julio en Buenos Aires. Reuters

Los analistas de Morgan Stanley pronosticaron la semana pasada que el FMI y el Gobierno de Fernández llegarán a un acuerdo antes de que termine julio. En una breve nota del 17 de julio, sostuvieron que cualquier movimiento para dolarizar la economía necesitaría una preparación sustancial.

"Nuestra atención permanece en las negociaciones entre las autoridades y el FMI, luego las [elecciones]", concluyeron. Tras las primarias del 13 de agosto, los argentinos decidirán su nuevo presidente en las presidenciales del 22 de octubre. Pero, gane quien gane las elecciones, Argentina saldrá escaldada de su tortuosa relación con el FMI.

[El fin del peso: la inflación hace inminente el paso de Argentina al dólar en plena carrera electoral]

[Gobernar entre bastidores y sin ir a elecciones: el plan de Kirchner para seguir al mando de Argentina]

Por un lado, los peronistas, en el poder desde 2019, lamentan que el Gobierno liberal de Mauricio Macri, predecesor del actual, entrara en negociaciones con el Fondo. La vicepresidenta de Fernández, Cristina Fernández de Kirchner, condenó el 9 de julio: "Al FMI no lo trajo un político, lo trajo un empresario, porque el presidente que lo trajo era del bando de los empresarios".

El propio ministro Massa pidió el pasado junio que Argentina tenía que pagar la deuda al Fondo para "no volver nunca más a él". "Una obsesión que tiene que tener el próximo presidente, el que sea: el programa exportador, juntar todos los dólares que Argentina necesita para pagarle al Fondo y sacar al fondo de Argentina y no volver nunca más al Fondo", afirmó en declaraciones recogidas por el diario Clarín.

Massa ha asegurado que los 45.000 millones de dólares (40.400 millones de euros) concedidos por el FMI al anterior Gobierno argentino de Mauricio Macri significaron "asumir metas, compromisos y obligaciones en términos de programa económico" que a su vez implicaban ceder una parte de la autonomía del país, informa Reuters.

Por otro lado, la oposición centroderechista critica la gestión de Massa como ministro de Economía por su debilidad para negociar con el FMI ―además de para afrontar los niveles galopantes de inflación anual y la evaporación de las reservas monetarias―.

[El plan de China para frenar al dólar en América Latina: alimentar a los países en crisis con yuanes]

[Argentina pide a Von der Leyen un pacto con Mercosur "equilibrado" en el que no gane sólo la UE]

Los próximos cuatro años se presentan dificultosos para quien sea que ocupe la Casa Rosada a partir de diciembre, cuando expire el mandato de Alberto Fernández. Si Massa consigue dar el salto de ministro a presidente, es justo esperar que Argentina busque financiación en fondos alternativos al FMI, como China o el Nuevo Banco de Desarrollo.

Si regresa la derecha al Gobierno ―lo que, según las encuestas, parece más probable―, los sucesores de Macri buscarán solucionar la crisis económica actual con nuevos acuerdos con el Fondo.