La activista trans que ha salvado la vida de Chelsea Manning
Evan Greer ha liderado campañas para defender los derechos de la exsoldado que filtró miles de documentos clasificados del Ejército.
18 mayo, 2017 03:53“La libertad solía ser algo con lo que soñaba pero que no imaginaba para mí. Tras casi siete años entre rejas podré volver a experimentarla. Por primera vez veo un futuro para mí ahí fuera”. Chelsea Manning escribía estas palabras la pasada semana desde su celda en la prisión militar de Fort Leavenworth (Kansas). La responsable de la mayor filtración de la historia, ha salido este miércoles de la cárcel convertida en un referente global de la lucha por los derechos de la comunidad LGTB.
First steps of freedom!! 😄https://t.co/kPPWV5epwa#ChelseaIsFree pic.twitter.com/0R5pXqA1VN
— Chelsea Manning (@xychelsea) 17 de mayo de 2017
La exsoldado filtró en 2010 hasta 750.000 páginas con documentos confidenciales del ejército de EEUU sobre la guerra de Afganistán. Con su publicación puso de forma definitiva a Wikileaks en el mapa y cambió su vida para siempre. De analista de inteligencia para las fuerzas armadas a ser señalada y condenada como una traidora de EEUU. En el camino, Manning -que cuenta ahora 29 años- pasó de ser Bradley a Chelsea. Una reasignación de género radiada casi en directo y entre los barrotes de una cárcel sólo para hombres.
Durante su odisea, Manning ha tenido compañía. En especial, una persona que no ha podido conocer durante su estancia en prisión pero que ha jugado un papel clave en su liberación. Se trata de Evan Greer, que lideró varias campañas para visibilizar la situación de Chelsea y ha luchado hasta el final para que Barack Obama firmara el indulto de la exmilitar, en una de sus últimas decisiones en la Casa Blanca.
“Su liberación es una victoria para la libertad de expresión. Es el legado del poder del activismo de base, si no fuera por las centenares de personas de todo signo político que se han movilizado no estaría con nosotros”, ha declarado esta activista y directora de la ONG Fight For The Future.
Chelsea Manning has been released! Here's my immediate reaction :) I made a video without crying! Support her: https://t.co/OHJdeL3uib pic.twitter.com/g145ECSKnC
— Evan Greer (@evan_greer) 17 de mayo de 2017
Trato vejatorio en la cárcel
Hace pocas semanas, durante un encuentro con periodistas titulado “Cómo salvamos la vida de Chelsea Manning”, Greer relataba su primer contacto con la célebre fuente de Wikileaks: “Fue ella la que se puso en contacto conmigo. Sabía de mi trabajo con otros reclusos y sabía que también era transexual”. La relación de confianza que ambas han tejido ha sido exclusivamente telefónica. Las estrictas normas de la prisión militar en la que Manning ha cumplido condena impedían el contacto con ninguna persona que no conociera ya antes de ser encarcelada.
“He llegado a pensar que nunca saldría con vida de la cárcel”, admite Greer. Tanto el equipo de abogados que ha defendido a Manning como el ejército de activistas que se han unido a su causa llevan años denunciando que ha sufrido un trato “vejatorio” que le ha empujado a dos intentos de suicidio durante su estancia en prisión. “Ha sido amenazada con castigos y temporadas en una celda de aislamiento por cometer ‘infracciones’ como guardar una pasta de dientes caducada. Los funcionarios le han acosado en múltiples ocasiones obligándola incluso a cortarse el pelo”, relata Greer.
Sin acceso directo a Internet y prácticamente incomunicada, Manning ha conseguido liderar desde prisión una engrasada maquinaria de activistas y abogados. “En realidad se ha salvado ella misma rodeándose de una comunidad que le ha ayudado”, defiende la activista.
Desde Fight For The Future, ha movilizado a centenares de personas en manifestaciones para defender los derechos de Manning en prisión: “Hemos protestado en las calles, frente al Pentágono, junto a la cárcel… logramos miles de firmas y hemos inundado de llamadas, cartas y tuits las instituciones…”. Para Greer la liberación anticipada de Manning va más allá de un triunfo para la comunidad LGTB. En este artículo publicado esta semana en OpenCanada Greer ha defendido que “el Gobierno de EEUU quiso borrar a Chelsea Manning junto a los delitos que ayudó a revelar. Nosotros nos hemos ocupado de que nunca haya sido olvidada”.