La estudiante de Oxford demasiado "brillante" para ir a la cárcel

La inteligencia es un buen don para triunfar en la vida en general pero, ¿alguna vez habría pensado en poder librarse de la cárcel por su talento? Esta puede ser la suerte de Lavinia Woodward, una “estudiante extraordinaria” de la universidad de Oxford. A pesar de haber confesado que apuñaló a su ahora ex novio, un juez ha dicho que de ser condenada sería una sentencia “demasiado severa” teniendo en cuenta su expediente y sus aspiraciones profesionales.

Todo ocurrió el pasado mes de diciembre en el prestigioso Christ Church College de la Universidad ed Oxford. Woodward y su entonces novio vivían una noche desenfrenada en la que la joven asegura haber abusado del alcohol y las drogas. Durante una pequeña riña, ella perdió el control: se lanzó contra él, lo golpeó y acabó por clavarle un cuchillo del pan en la pierna. Después, le arrojó un portátil, un vaso de cristal y un bote de mermelada.

Tras confesar el crimen, Woodward podría evitar la cárcel cuando el juez dicte la sentencia definitiva el próximo mes de septiembre. El magistrado Ian Pringle, durante la vista que ha tenido lugar en el juzgado de Oxford, ha dado a entender que la joven estudiante de medicina podría salir indemne al tratarse de un hecho “único e irrepetible”, según cuenta el diario Oxford Mail.

"Me parece que si fue una sola vez, una única vez, una sentencia demasiado severa podría hacer que esta jovencita no pueda conseguir su ansiado deseo de entrar en la profesión que quiere”, aseguró el juez en el relato que publica el diario inglés.

De hecho, ese ha sido el argumento de la defensa. El abogado de Woodward dijo durante la vista que sería “casi imposible” que su clienta pudiese convertirse en cirujana algún día cuando declare ante sus futuros empleadores su certificado de delitos penales, una práctica muy habitual cuando te postulas a un trabajo en el Reino Unido.

El defensor de la joven también pidió la compresión del juez Pringle al revelar que la estudiante había sufrido abusos en una relación anterior y que había caído en las drogas. Ahora, sin embargo, ha obtenido la autorización de Oxford para volver a la Universidad a partir de octubre debido a lo “brillante” que es y los numerosos artículos que publica en prestigiosas revistas médicas.

El juez reconoció durante el juicio que lo que la joven hizo fue algo horrible y que “normalmente acarrearía una pena privativa de libertad” pero ha tomado una decisión sin precedentes aplazando la sentencia hasta el próximo 25 de septiembre y apuntando a la posibilidad de no imponerle una pena de cárcel. Por el momento, la joven tiene una orden de alejamiento, deberá mantenerse limpia de alcohol y drogas y no podrá reincidir.