Macron liga la ecotasa de carburantes al petróleo para calmar a los 'chalecos amarillos'
- El presidente francés anuncia que se revisará cada tres meses este impuesto para compatibilizar "el fin del mundo con el fin de mes".
- Los 'chalecos amarillos' incendian París y el Elíseo culpa de los disturbios a la extrema derecha.
- ¿Quiénes son, de verdad, los Chalecos Amarillos?
El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció este martes que se aumentará la financiación de las energías renovables de 5.000 millones de euros anuales a 7.000 u 8.000 millones, al tiempo que prometió que los impuestos a los carburantes se adaptarán a las fluctuaciones del precio del petróleo.
"Hay que adaptar el alza de impuestos al mercado petrolero. Deseo que en tres meses haya un método para que esta tasa sea más inteligente dado que ahora es un poco ciega, y tener una cita trimestral que mitigue el efecto de un aumento en los precios mundiales", afirmó Macron en un discurso para presentar su política energética.
Su intervención se produce en una situación particularmente tensa con el movimiento popular de los "chalecos amarillos", que protesta contra la subida de las tasas a los carburantes.
Macron anunció una "gran concertación sobre la transición ecológica y social" para que políticos y asociaciones creen un debate por territorios para ofrecer en tres meses una hoja de ruta que de soluciones "más simples y concretas" al acompañamiento ciudadano en la transición ecológica.
"El fin del mundo y el fin de mes"
El presidente recogió el eslogan recientemente lanzado por su exministro de Transición Ecológica Nicolas Hulot de que hay que abordar al mismo tiempo "el fin del mundo y el fin de mes", y prometió que su intención es "tratar ambos".
En el ámbito de las medidas ecológicas, Francia cerrará 14 de sus 58 reactores nucleares de aquí a 2035, diez años después del objetivo inicial -que fue ya desestimado por el Ejecutivo-, comenzando por las dos de la central de Fessenheim de aquí al verano de 2020.
Francia, dijo Macron, triplicará la producción eólica terrestre de aquí a 2030, multiplicará por cinco la fotovoltaica y lanzará 45 nuevos concursos para ampliar los campos eólicos en el mar.
El jefe del Estado francés concretó algunas promesas del mandato, como el cierre de las fábricas de carbón de aquí a 2022 y o un aumento de las primas de conversión para salir de las energías fósiles, de las que el Gobierno espera que el país se limpie en el horizonte de 2050.