Finlandia aborda un petrolero ruso tras un nuevo sabotaje de un cable eléctrico submarino y cuatro líneas de internet
- El interconector Estlink 2, que conecta este país con Estonia, es uno de los que resultó dañado el miércoles y su reparación llevará varios meses.
- Más información: Europa redobla la protección de los cables eléctricos submarinos ante el temor de que Rusia o China traten de cortarlos
Las autoridades de Finlandia incautaron este jueves un barco que transportaba petróleo ruso en el mar Báltico bajo la sospecha de que causó el corte de un cable eléctrico submarino que conectaba Finlandia y Estonia este miércoles, y que también dañó o rompió cuatro líneas de internet. Este nuevo suceso es el último capitulo de una serie de incidentes que involucra a cables y tuberías de energía dañados en el Mar Báltico.
Los países del Báltico están en alerta máxima por posibles actos de sabotaje tras una serie de cortes de cables eléctricos, enlaces de telecomunicaciones y gasoductos desde el año 2022, aunque los equipos submarinos también sufren fallos técnicos y accidentes.
La reparación del cable dañado este miércoles, Estlink 2 de 170 kilómetros, llevará meses y su interrupción podría causar problemas en el suministro eléctrico durante el invierno, señaló este miércoles el operador Fingrid en un comunicado.
La interrupción del suministro eléctrico de Estlink 2, de 658 megavatios comenzó al mediodía del miércoles, dejando sólo el Estlink 1, de 358 MW, en funcionamiento entre ambos países, según Fingrid.
Tras una investigación, la guardia costera finlandesa abordó el petrolero ruso, registrado en las Islas Cook, y llevó el barco hacia aguas finlandesas.
"Por nuestra parte estamos investigando un grave sabotaje", dijo Robin Lardot, director de la Oficina Nacional de Investigación de Finlandia. "Según nuestro conocimiento, un ancla del buque que está siendo investigado habría causado el daño", añadió.
Además, dos cables de fibra óptica propiedad del operador finlandés Elisa que unen Finlandia y Estonia aparecieron rotos, mientras que un tercer enlace entre los dos países, propiedad de la empresa china Citic, fue dañado, señaló la agencia finlandesa de transporte y comunicaciones Traficom.
También se cree que un cuarto cable de Internet que corre entre Finlandia y Alemania y que pertenece al grupo finlandés Cinia fue cortado, dijo la agencia.
El primer ministro de Estonia, Kristen Michal, anunció en una publicación en X que estaba en estrecho contacto con sus homólogos de la región nórdica y báltica.
Mientras tanto, las autoridades suecas está llevando a cabo una investigación sobre la rotura el mes pasado de dos cables de telecomunicaciones del Mar Báltico, en un incidente que el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, asume que fue causado por un sabotaje.
La Policía finlandesa sigue investigando también los daños causados el año pasado al gasoducto Balticconnector, que une Finlandia y Estonia, así como a varios cables de telecomunicaciones, y ha afirmado que probablemente fueron causados por un barco que arrastró su ancla.
En 2022, los gasoductos Nord Stream entre Rusia y Alemania, que discurren por el lecho marino de las mismas aguas, fueron volados, en un caso que todavía está siendo investigado por Alemania.