El presidente ucraniano, durante un encuentro con la prensa en Kyiv.

El presidente ucraniano, durante un encuentro con la prensa en Kyiv. Thomas Peter Reuters

Europa

Zelenski se aferra a la tregua parcial acordada por Trump y Putin para mantener el apoyo militar de Estados Unidos

El presidente ucraniano se compromete a detener los ataques contra las infraestructuras energéticas rusas en una conversación telefónica de una hora que la Casa Blanca describió como "excelente".

Más información: Putin vuelve a rechazar la tregua en Ucrania tras hablar con Trump y sólo le promete dejar de atacar las plantas de energía

Publicada
Actualizada

El teléfono sonó este miércoles hacia las once menos veinte de la mañana en Washington. Seis horas más en Kyiv. Descolgaron Donald Trump y Volodímir Zelenski, que comenzaron a hablar. Era la primera vez que lo hacían desde que el pasado viernes 28 de febrero el mandatario estadounidense y su vicepresidente JD Vance abroncaron al líder ucraniano frente a las cámaras de televisión en el Despacho Oval. "Estás jugando con la Tercera Guerra Mundial", le espetó Trump. "¿Has dado las gracias una sola vez?", le reclamó Vance. Acorralado, Zelenski abandonó la Casa Blanca por la puerta de atrás. Sin firmar el acuerdo sobre tierras raras y minerales críticos. Sin asegurarse el apoyo de Estados Unidos en la guerra defensiva que libra contra Rusia.

El tono de la conversación de este miércoles nada tuvo que ver con aquel episodio, sin embargo. "Acabamos de mantener una excelente conversación telefónica con el presidente Zelenski de Ucrania", avanzó Trump en su plataforma Truth Social. "Tuve una conversación positiva, muy sustanciosa y franca con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump", confirmó después Zelenski en la red social X.

"Ha durado aproximadamente una hora. Gran parte de la conversación se basó en la llamada realizada ayer con el presidente Putin para alinear tanto a Rusia como a Ucrania en cuanto a sus peticiones y necesidades", informó el mandatario estadounidense. "Estamos muy bien encaminados", añadió el mensaje de Trump, que delegó en su secretario de Estado, Marco Rubio, y su asesor de seguridad nacional, Mike Waltz, la "descripción precisa de los puntos tratados" en la conversación con Zelenski.

Según adelantó Bloomberg, el presidente ucraniano se comprometió a detener los ataques contra las infraestructuras energéticas rusas, la única condición del alto el fuego inicial de treinta días propuesto por Trump que Putin aceptó ayer durante su conversación telefónica con el mandatario estadounidense. "Uno de los primeros pasos hacia el fin total de la guerra podría ser poner fin a los ataques contra la energía y otras infraestructuras civiles. Apoyé este paso, y Ucrania confirmó que estamos listos para implementarlo", confirmó Zelenski, que ordenó a su equipo que resolviera "las cuestiones técnicas relacionadas con la aplicación y ampliación del alto el fuego parcial".

La portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce, deslizó más tarde en rueda de prensa que, durante la conversación, Trump trasladó a Zelenski su interés en tomar el control de las plantas nucleares y las centrales eléctricas de Ucrania. "Estados Unidos podría ser de gran ayuda en el funcionamiento de esas plantas con su experiencia en electricidad y servicios públicos", recoge la declaración conjunta de Rubio y Waltz, leída por Bruce. "La propiedad estadounidense de esas plantas sería la mejor protección para esa infraestructura y el apoyo a la infraestructura energética ucraniana".

La nota firmada por el secretario de Estado y el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca subraya, además, que Zelenski "pidió más sistemas de defensa antiaérea para proteger a su población civil, en particular sistemas de misiles Patriot", una solicitud con la que Trump "aceptó colaborar" para encontrar aquellos que estuvieran disponibles, "en particular en Europa".

Canje de prisioneros

Minutos antes de que empezara la conversación telefónica entre Trump y Zelenski, Rusia y Ucrania efectuaron el intercambio de 175 prisioneros de guerra que Putin acordó ayer con Trump. En el mismo canje, Rusia liberó a otros 22 soldados ucranianos "gravemente heridos". Un gesto de buena voluntad del presidente ruso hacia su homólogo estadounidense, en palabras del Kremlin. El propio Zelenski confirmó el intercambio a través de la red social X, donde anunció que "todos" los liberados "recibirán inmediatamente la asistencia médica y psicológica necesaria". Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso se limitó a agradecer la mediación de "carácter humanitario" de Emiratos Árabes Unidos para sellar el canje.

Zelenski confirmó por la mañana durante una visita oficial a Helsinki, desde donde habló con Trump, que discutiría con el presidente de Estados Unidos el alto el fuego entre su país y Rusia que Putin rechazó ayer. El enviado especial de Trump para Oriente Próximo, Steve Witkoff, que aterrizó en Moscú la semana pasada para reunirse con el presidente ruso, describió la conversación telefónica que Trump y Putin mantuvieron ayer como "épica, transformadora". Pero el exagente del KGB sólo se comprometió a dejar de bombardear las plantas de energía de Ucrania durante treinta días. Nada más.

En una rueda de prensa conjunta con el presidente de Finlandia, Alexander Stubb, Zelenski declaró este miércoles que las promesas de Putin no eran suficientes y que Ucrania proporcionaría un listado de centrales energéticas que esperaba que Washington y sus socios contribuyeran a vigilar. "De verdad deseo que haya supervisión. Pero considero que el principal responsable de este control debería ser Estados Unidos", expresó el mandatario ucraniano, que quiso dejar claro que Kyiv estaba dispuesto a comprometerse con la tregua. "Si los rusos no atacan nuestras infraestructuras, nosotros, sin duda, no golpearemos las suyas", insistió.

Una tregua frágil

El Kremlin informó ayer de que Rusia había detenido sus ofensivas contra el sistema energético ucraniano tras una conversación telefónica entre Putin y Trump, y que había derribado sus propios drones dirigidos a territorio ucraniano mientras aún estaban en el aire. Durante la llamada, Putin accedió a suspender temporalmente los bombardeos contra instalaciones energéticas ucranianas, pero se negó a aceptar un cese total de hostilidades durante treinta días, como esperaba Trump.

Sin embargo, las autoridades ucranianas confirmaron daños en dos hospitales de la región nororiental de Sumy y en la infraestructura ferroviaria de Dnipropetrovsk, en el sureste del país, como consecuencia de un ataque ruso con drones. Otra ofensiva aérea rusa golpeó además el municipio de Sloviansk, en Donetsk. Zelenski denunció que el ataque, que según su fuerza aérea incluyó 145 drones, demostraba que "las declaraciones de Putin son muy distintas de la realidad" y solicitó que Occidente mantuviera el respaldo militar a Ucrania.

Las fuerzas ucranianas aseguraron haber destruido 72 aeronaves no tripuladas, mientras que Moscú declaró que sus unidades de defensa aérea derribaron 57 drones enemigos, sin especificar el número total lanzado. Rusia también informó que Ucrania había atacado una estación de bombeo de petróleo en su territorio meridional.

"La respuesta a las iniciativas de paz del presidente Trump fue la llegada de 150 drones Shahed, construidos por rusos con planos iraníes, dirigidos contra infraestructuras civiles", lamentó este miércoles el asesor de Zelenski, Myjailo Podolyak. "Tiendo a creer que Putin está actuando de buena fe. Ayer le dijo al presidente que iba a operar de buena fe y le tomo la palabra", declaró sin embargo Witkoff.

Negociación indirecta en Arabia Saudí

El diálogo de este miércoles de Zelenski con Trump fue el primer contacto directo conocido entre ambos desde su desencuentro en la Casa Blanca el mes pasado, que puso en riesgo la relación entre Kyiv y su mayor aliado militar. El mandatario ucraniano prometió que recabaría más información sobre los asuntos tratados entre Trump y Putin, y que su Gobierno prepara una nueva ronda de reuniones con representantes estadounidenses para discutir los aspectos técnicos de la tregua parcial.

Durante la visita oficial de Zelenski a Finlandia, Stubb señaló que la conversación entre Trump y Putin constituyó un avance positivo, pero que Rusia debería enfrentar presión si no aceptaba la suspensión de hostilidades sin condiciones. "Si el Kremlin se niega a aceptar, debemos reforzar nuestro apoyo a Ucrania y aumentar la presión sobre Rusia para convencerla de volver a la mesa de negociación".

Antes de que comenzara la conversación entre Trump y Zelenski, Waltz confirmó haber mantenido otra llamada telefónica con su homólogo ruso Yuri Ushakov. Los dos negociadores, que coincidieron en febrero durante la primera toma de contacto en Riad entre la Administración Trump y el Kremlin, volverán a verse las caras en territorio saudí.

Según Waltz, ambos acordaron reunir a sus respectivos equipos técnicos "en los próximos días". En este sentido, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, no descartó la posibilidad de que tuviera lugar un encuentro bilateral entre Putin y Trump en el Reino del Desierto. "Pero todavía no hay datos concretos sobre este asunto", puntualizó este miércoles en declaraciones a la agencia estatal de noticias rusa TASS.

En paralelo, Zelenski confirmó que la delegación ucraniana también esperaba reunirse "en los próximos días" con sus homólogos estadounidenses en Arabia Saudí. Un encuentro que, en palabras de Rubio y Waltz, debe servir para discutir "la ampliación del alto el fuego al mar Negro en el camino hacia un alto el fuego total". "Hemos tomado nota del trabajo positivo de nuestros asesores y representantes-Rubio, Waltz, Kellogg, Yermak, Sybiha, Umerov y Palisa", zanjó el mandatario ucraniano. "En nuevas reuniones, los equipos podrán acordar todos los aspectos necesarios para avanzar hacia una paz duradera y garantías de seguridad".