Un frutero español da la clave para pelar y cortar rápidamente una piña: "Fácil, rápido y sencillo"

En nuestro día a día hay momentos en los que nos da pereza pelar y cortar la fruta, sobre todo cuando parece que nos estamos complicando más de lo necesario. Y, a veces, es más tentador ir a lo fácil: comprarla ya lista.

Pero, ¿y si te dijéramos que pelar una piña no tiene por qué ser un drama? Pues eso es precisamente lo que nos enseña este frutero español, @fruterotiktokero, en su perfil de TikTok. Con su método sencillo y eficaz, nos demuestra que en unos minutos podemos tener la piña perfecta para disfrutar, sin perder tiempo ni esfuerzo. "Fácil, rápido y sencillo", asegura mientras comienza a cortar la fruta, dejando claro que no hay necesidad de complicarse. 

El primer paso, según él, es fundamental: colocar la piña correctamente. "Ponla así, mirándote a ti", dice mientras coloca la piña en la tabla de cortar, asegurándose de que esté bien establecida. Este simple ajuste garantiza que podamos cortar con facilidad, evitando que la piña se deslice por toda la mesa. Es un detalle pequeño, pero esencial, que cambia por completo la forma en que normalmente llevaríamos a cabo el proceso de pelar la fruta. 

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Una vez que la piña está bien colocada, el frutero utiliza un cuchillo pequeño para empezar a cortar las partes más duras. "Este trozo blanquecino está duro, así que cómetelo, pero no se lo pongas a tu familia", bromea mientras se deshace de la base, que, aunque comestible, no es lo más sabroso. A partir de aquí, todo se hace mucho más rápido. En pocos cortes, la piña va perdiendo su piel exterior, y el proceso se vuelve cada vez más eficiente.

Con un par de movimientos, la piña queda lista para ser presentada de manera perfecta. "Con el cuchillito por debajo, ya puedes empezar a cortar las rodajas", explica mientras avanza. Su método es tan directo que, en cuestión de minutos, la piña está lista para ser disfrutada sin perder tiempo ni hacer demasiados pasos innecesarios. Además, su truco no solo ahorra tiempo, sino que también previene el desperdicio de fruta. 

A lo largo del vídeo, el frutero también nos recuerda que, aunque su truco nunca falla, si compramos una piña de mala calidad, "eso ya no es mi culpa", bromea. Y es que, aunque tengamos la mejor técnica, la calidad de la fruta siempre será un factor clave para que el resultado sea óptimo. Un recordatorio gracioso de que, a veces, lo que tenemos en casa no depende de lo bien que cortemos, sino de lo que compramos.