El gobierno ha anunciado que la lista de morosos españoles no podrá ser accedida a través de Google ni de otros buscadores web.

Con las elecciones al Parlamento español a la vuelta de la esquina el gobierno español está metiéndose prisa en aprobar leyes que le podrían ganar el apoyo del electorado; de estas la nueva Ley General Tributaria es una de las más importantes.

De entre todas las reformas introducidas, hay una muy popular: la publicación de una lista de morosos españoles, los que deban al menos un millón de euros a las arcas de Hacienda.

La lista de morosos españoles existirá pero no la podremos encontrar

Una lista que estará accesible “por medios electrónicos”, que es la manera primitiva de decir que será accesible por Internet; de esta manera se espera que la presión social de ver su nombre en la lista haga que los deudores paguen de una vez por todas. Sin embargo, esta medida, igual que otras partes de la Ley Tributaria, nace con las alas cortadas por una decisión un tanto extraña.

El gobierno ha anunciado que se tomarán medidas para impedir la indexación del contenido de la lista por parte de los buscadores web como Google. Es algo fácil de hacer, y que nos recuerda al “derecho al olvido” que tanto éxito está teniendo en Europa y que obliga a los buscadores a dejar de mostrar resultados de las personas que lo soliciten. El problema es que si por defecto la lista no será indexada por Google, entonces ¿para qué colgarla?

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La inmensa mayoría de la gente no va a saber encontrar la lista si no está en su buscador favorito; incluso muchos ni siquiera sabrá que existe. Si buscamos el nombre de un posible deudor porque no estamos seguros de si hacer negocios con él, no encontraremos su nombre cuando lo busquemos por la web. Subir una lista semejante a un servidor y no permitir que se encuentre es como imprimirla y esconderla debajo de una baldosa en mitad de Madrid; sí, has creado una lista de morosos, pero ¿a quién le servirá, excepto para los que saben debajo de qué baldosa está?

Da la sensación de que esta lista no es más que una manera de presumir ante el electorado sin que haya conseguido nada concreto. El hecho de que en la lista no se encuentren los deudores que se acogieron a la infame amnistía fiscal del gobierno ya debería darnos una pista de que esta no es mas que una campaña electoral disfrazada de ejercicio de transparencia, que es lo que se lleva ahora.