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Los beneficios psicológicos para los niños de la terapia asistida con perros

12 febrero, 2015 16:47

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A lo largo de los años se han visto claras evidencias de los efectos positivos que tiene la terapia asistida con animales sobre las personas. Hoy nos centraremos más en la terapia con perros para los niños. Durante la terapia los perros tienen un rol de asistencia y han de ser perros que reúnan ciertos criterios específicos, ellos forman parte indispensable del tratamiento, podríamos decir que es el eje principal de dicha terapia. Se trata de una interacción niño-perro guiada por un equipo multidisciplinar (psicólogo y entrenador canino por ejemplo). Una de los puntos más importantes es que el perro rompe las barreras que existen a veces entre terapeutas y niños. No cuesta tanto ir al psicólogo si allí me espera su co-terapeuta de cuatro patas.

Los principales beneficios psicológicos de la terapia asistida con perros

1. Mejora de la autoestima: El niño se siente aceptado, querido, respetado, y sobre todo no se siente juzgado.

2. Mejora la capacidad de aprender: Focalizar la atención en un eje positivo facilita la mejora en el proceso de aprendizaje.

3. Mejora la atención sostenida: La atención está centrada en el perro.

4. Mejora las relaciones sociales: El perro consigue desbloquear al niño, el perro no te juzga si hablas y dices algo que no está bien.

5. Ayuda a un comportamiento asertivo: El perro entrenado es un modelo de conducta positivo.

6. Disminución del estrés: Reduce la ansiedad,el estado depresivo y el sentimiento de soledad, acariciar a un perro es eficaz para aliviar el estrés y bajar la presión sanguínea.

7. Mejora de la seguridad en si mismo: Cada vez que algún ejercicio con el perro sale bien el niño se siente más seguro y esta seguridad en si mismo será generalizada a otros ámbitos. Además mejora la responsabilidad.

8. Mejora del estado de ánimo: Favorece estados de animo positivos y previene la depresión.

9. Mejora de la forma de comunicarse y el lenguaje: El perro incita a que el niño se quiera comunicar.

10. Objetivos terapéuticos más rápidos: Es más rápido y sencillo conseguir los objetivos, ya que aumenta la motivación, implicación e iniciativa. Facilita la intervención con pacientes muy resistentes y que antes no habían respondido con mejoría a otros tratamientos más convencionales.

11. Estimula la risa, la diversión y el juego: lo cual resulta una distracción positiva en el ambiente de trabajo y ayuda a disminuir las sensaciones de aislamiento.

12. Mejora la empatía, la aceptación y la confianza mutua: Los perros abren una vía de comunicación emocionalmente segura con los niños, que no se sienten juzgados.

Nos encontramos ante una terapia que resulta atractiva incluso en personas a las que no le gustan los perros, y que ayuda a incrementar la calidad de vida de los niños.  Cada caso tiene que ser estudiado minuciosamente por parte de los profesionales del sector según el caso a tratar y establecer un programa especifico y exclusivo para cada paciente.