¿Incapaz de contar ovejas? Puedes padecer aphantasia
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De pequeños nos enseñan un sencillo truco para lograr conciliar el sueño: contar ovejas. 1 oveja, 2 ovejas, 3 ovejas… 35 ovejas… y cundo queremos darnos cuenta estamos plácidamente sumidos en el sueño. Algunas personas, no presentaban esta facilidad para quedarse dormidos, y sentían que la tarea de contar ovejas no terminaba de funcionar. Puede que no estemos lo suficientemente cansados, sin embargo, puede ser que padezcamos una recientemente definida condición que nos impida concebir la imagen de las ovejas en nuestra mente: La aphantasia.
¿Qué es la aphantasia?
Los desafortunados que padecen esta condición mental muestran una significante limitación en sus vidas, al ser incapaces de visualizar conceptos como recuerdos de sus compañeros, el dibujo final al empezara dibujar, o deducir la profundidad de una imagen al ver su contorno.
El neurólogo y profesor de ciencia cognitiva Adam Zeman, del Medical School en la Universidad de Exeter ha replanteado el concepto que definió en 1880 Sir Francis Galton que identificaba a un grupo de personas incapaces de visualizar. El concepto inexplorado hasta el momento, afecta alrededor de un 2,5% de la población.
Para entender mejor como nos afecta, debemos comprender que la visualización es un proceso que resulta de la actividad de diferentes regiones en el cerebro. Trabajan juntas, y nos permiten generar imágenes en nuestra memoria. Estas regiones incluyen áreas en los lóbulos frontales y parietales, los cuales organizan el proceso de visualización, y junto con las áreas temporales y occipitales, se representan los objetos que queremos llevar a visualizar a lo que conocemos como el ojo de la mente.
Problemas en las conexiones entre estas áreas puede llevar a la incapacidad de realizar este proceso. Anteriormente se describía como un daño cerebral en el contexto de trastorno de la personalidad, ahora el profesor Zeman y su equipo está realizando diferentes estudios para encontrar por qué ciertas personas nacen con esta incapacidad o disminución.
Serendipía en el descubrimiento
El periodista Carl Zimmer, escribió un articulo en la revista Discover sobre el paper que publicó el profesor Zeman, en el que se exponía el caso de un hombre que perdió su ojo de la mente a los 60 años. Por fortuna, aparecieron 21 individuos que afirmaban padecer el mismo caso que aquel señor, y que estarían dispuestos en colaborar para aclarecer que padecen.
De esta forma, el profesor Zeman elaboró un estudio con estos pacientes y lo publicó en Cortex. El caso más curioso que registraron fue el de Tom Ebeyer, un chico de 25 años que sintió una amarga sensación al conocer que su novia podía visualizar cosas de las que él era incapaz.
‘Me sentí totalmente solo. Era incapaz de recordar algunas vivencias, recordar el olor de las flores o la voz de algún ser querido. Pensaba que eran cosas normales, y que el resto de personas tenían el mismo problema.’
Para Tom, era totalmente imposible imaginar un sonido, textura, sabor, olor, emoción o cualquier otro tipo de imaginación.
Zeman afirma que el estudio llevado a cabo por su equipo no solo ha conseguido comprender con más precisión esta extraña condición, sino que además ha encontrado que no existe relación entre la imaginación voluntaria, y la imaginación involuntaria (la que realizamos en los sueños), pues este última seguía existiendo en las personas que sufrían de esta condición.
Fuente | University of Exeter