El secreto de la picadura de mosquito, desvelado
Cómo pica un mosquito es algo que no solemos ver, pero sí lo sentimos. Veamos este didáctico vídeo, pues hemos vivido engañados.
11 junio, 2016 12:11Noticias relacionadas
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Mosquitos, esos diminutos pero prolíficos seres que nos visitan cada verano.
Cómo pica un mosquito es algo que todos creemos saber, pero que casi nadie ha podido ver en realidad. De hecho, a lo sumo, lo único que conseguimos es pillar infraganti a este despiadado insecto alado mientras nos chupa la sangre modo vampiro. Siempre comparamos su picadura con la de otros insectos, como las avispas o las abejas, pensando que tan solo tienen un diminuto aguijón o que nos consumen la sangre con una especie de pequeño “mordisco”.
Pero, ¿y si estábamos equivocados? Los mosquitos no tienen una sola “boca”. De hecho, tienen un pequeño conjunto de agujas o “estiletes” con un rebestimiento llamado “labio”. Este labio se recoge hacia arriba cuando los estiletes se sumergen en la piel. Y solo en las hembras, porque como ya sabéis los mosquitos macho no pican.
Así es cómo pica un mosquito, en vídeo
Como podéis ver en el vídeo, los dos primeros estiletes tienen forma de aguja y se llaman maxilares; son similares a los dientes de sierra y se usan para cortar a través de la piel para ayudar a extraer la sangre. Por otro lado, los otros dos estiletes se llaman mandíbulas y mantienen los tejidos abiertos. Por otro lado está la aguja principal, que se puede ver flexionando a un lado y a otro en busca del capilar que será víctima de la succión de la sangre.
Aunque lo parezca, esta aguja principal no es un tubo único sino que son dos: El labrum, que es el encargado de succionar la sangre, y la hipofaringe, que libera lentamente el veneno en la herida para aumentar el flujo sanguíneo y disminuye la reacción el sistema inmune, a la vez que mantiene lubricados el resto de estiletes para que se deslicen con facilidad.
Probablemente os preguntaréis por qué siguen existiendo los mosquitos si parece que tan solo sirven para ser vectores de enfermedades como el Zika, el Dengue o la Malaria. Y según algunos estudios, la realidad es que perfectamente podríamos acabar con todos los mosquitos del planeta y no pasaría nada, pues no se alteraría la cadena trófica, o al menos eso piensan algunos autores. La realidad es que no tenemos ni idea de cuáles serían las consecuencias a largo plazo de acabar con este insecto. Sí, es cierto que nos evitaríamos muchos disgustos en verano, pero posiblemente a la naturaleza no le hiciese demasiada gracia su extinción.