La tecnología ha avanzado de manera increíble en las últimas décadas, pero la velocidad de ese avance empieza a ser exponencial. Los smartphones son quizás el elemento que personifica mejor ese cambio de paradigma pero hay otras tecnologías, alejadas de los dispositivos de consumo, que a medio plazo tendrán un impacto crítico a nivel mundial.

Una de las más importantes es la detección facial, algo que hemos visto en algunos móviles pero que usado a otra escala y con otros propósitos nos da una predicción bastante más inquietante de nuestro futuro.

China es pionera en detección facial

Como en muchos otros aspectos, China es un país que está avanzando más que el resto de sus competidores a la hora no sólo de desarrollar ciertas tecnologías, sino también de ponerlas en práctica.

Un buen ejemplo es el de los sistemas de detección facial, que se aplican a las cientos de miles de cámaras que hay por todo el país y a las que por supuesto tiene acceso el gobierno.

Sus ciudadanos no es que tengan muchas posibilidades de protestar ya que recordemos que China no es una democracia. Así pues, gustará más o menos pero no sorprende que un sistema político autoritario aplique estas medidas.

La detección facial llega a la mayor democracia del mundo

La novedad es que La India, el segundo país con más habitantes del mundo (y en breve el primero), ha decidido instalar un sistema de detección facial en sus aeropuertos.

Por el momento este sistema no es obligatorio pero el gobierno indio ha recomendado su uso por una cuestión que, extrañamente, no es de seguridad, sino de eficiencia.

Los aeropuertos de este país están congestionados muchas veces. Cientos de millones de humanos no se mueven con fluidez cuando se trata de embarcar en aviones, como es lógico.

Es por eso que el estado está impulsando Digi Yatra (Viaje Digital), un sistema de reconocimiento facial que permite hacer el embarque sin necesidad de tener una tarjeta o código que confirme que hemos comprado un pasaje.

Gracias a la detección facial este sistema sabrá si cada una de las personas que hace cola para subir a un avión ha comprado el billete y en el caso de que el chequeo sea positivo, le dejará embarcar.

En febrero de 2019 este sistema se implantará en el aeropuerto internacional de Hyderabad y poco después llegará a otros cinco aeropuertos del estado.

Un primer paso, pero puede que no el último

Comparar a La India con China en lo que a calidad democrática se refiere no es justo. Pero teniendo eso es cuenta no podemos dejar de pensar en cómo el país más habitado del mundo implementó un sistema nacional de cámaras de seguridad que posteriormente usó para buscar delincuentes.

Este no ha sido el último de los usos controvertidos y es que el crédito social chino, un servicio que parece más propio de un capítulo de Black Mirror que de 2018, es ya una realidad.

Este programa condiciona el acceso a algunos servicios a algunas personas en función de su actividad en las calles de las ciudades del país. Esto es posible gracias a un sistema muy avanzado de detección facial.

Nada indica que La India vaya a implementar algo similar pero si la identificación por detección facial es algo que empiezan a adoptar los países de forma masiva es cuestión de tiempo que tengan a todos los ciudadanos permanentemente vigilados.