Quien pretende residir en Moncloa si gana el PSOE es capaz de asegurar en TVE ante 2.245.000 personas que un Gobierno socialista aprobó la Ley del Divorcio, a pesar de que cualquiera con cierta edad o el interés suficiente sabe que los españoles nos podemos divorciar desde 1981, un año antes de que Felipe pudiera hacer algo al respecto. ¿Cómo puede alguien que no conoce ni la historia de su país ni la de su partido aspirar a ser presidente del Gobierno?
El candidato de Podemos sabe mucho de prácticamente todo; incluso toca la guitarra -en El Hormiguero- y juega al ping pong -en EL ESPAÑOL- con cierta soltura. Presume de conocer las recetas económicas idóneas para la prosperidad del país y los mecanismos para promover una mayor igualdad entre los ciudadanos. Sin embargo, afirma que no tiene "información suficiente" sobre Leopoldo López como para denominarlo un preso político. Podría considerarse humildad, pero no parece ser ésta una de las virtudes del politólogo madrileño. ¿Cómo es posible que un hombre tan preparado como Iglesias no se haya documentado sobre la situación de uno de los reclusos más conocidos de mundo?
El candidato a renovar mandato en el Gobierno ha sobrevivido al tesorero de su partido, a quien él mismo promocionó, tras su paso por la cárcel y los medios, y sus 47 millones de euros en cuentas suizas. Rajoy le pidió vía SMS, probablemente desde la sede de Génova ahora investigada por la Justicia, que fuera fuerte. Ahora, dos años después, ha considerado su mensaje "un error". ¿Cómo puede un presidente sobrevivir políticamente a que su tesorero afirme que el partido ha estado financiándose ilegalmente durante 20 años? Eso ya debería haber sido suficiente, pero el mensaje de apoyo resulta demoledor.
En Ciudadanos van tan deprisa que se despistan. Tanto, que cometen errores en las cuentas. Quienes aspiran a poner a un catalán en la Moncloa sólo aciertan a cerrar la polémica con un "iremos mejorando". Al discurso sensato de Rivera habría que agradecerle que reconozca los errores, pero habría que exigirle no cometerlos.
Izquierda Unida propone que nadie cobre más de 6.500 euros al mes, tampoco el consejero delegado de Inditex. ¿Por qué no le explican a Garzón que para que se pueda compartir la riqueza, primero hay que generarla y que los que lo hacen requieren estímulos atractivos?
Los pueblos tienen los gobernantes que se merecen, dicen; si es así, tenemos mucho que mejorar, porque estos son una ruina.