La Palmirita llevaba 10 días abierta cuando sufrió un robo. Los ladrones aprovecharon que Nuria Lamas, la responsable del negocio, salió a comer ayer al mediodía para entrar en el local y llevarse unos 300 euros que tenía en la caja registradora.

Lamas explica que cuando llegó de su pausa del mediodía no notó nada raro hasta que intentó abrir con la llave y se percató de que no había cerradura. Los autores del robo habían dejado la puerta cerrada y en el interior apenas había destrozos, solo habían revuelto el mostrador.

Una operación que los ladrones realizaron con rapidez y usando guantes, según explica Lamas. Los responsables del robo usaron un mecanismo que les permite reventar la cerradura en unos segundos para abrir la puerta, incluso cuando como en el caso de esta tienda es de seguridad.

Solo se llevaron el dinero

"Tenía el iPhone, el iPad y el ordenador y no se llevaron nada. Venían solamente por el dinero", explica la responsable del establecimiento, que concreta que estuvo fuera de la tienda entre las 14:30 y las 15:20 horas. Ninguna persona de los negocios u oficinas del alrededor vio nada que le pareciese sospechoso.

Lamas ha formalizado la denuncia ante la Policía. La responsable del local pide más seguridad en la ciudad e indica que otros comerciantes le han trasladado que han sufrido robos similares en los últimos tiempos, una situación ante la que solicita que se tomen medidas.

Los autores del robo se llevaron unos 300 euros que la joven tenía de cambio. Dinero que Nuria Lamas siempre retira por la noche y que, indica , también se llevará cuando salga a comer a partir de ahora.

La joven, además, tuvo que cerrar el negocio ayer por la tarde y hoy por la mañana mientras ponía todo a punto de nuevo, reforzando la seguridad del local. "La tienda más cuqui" reabre esta tarde tras el "disgusto" que se llevó ayer su propietaria, que seguirá trabajando en sus artículos hechos a mano con la misma ilusión.