Argaia: La marca gallega que transforma plantas medicinales en cosmética ecológica

La marca gallega Argaia Biocosmética salió al mercado a finales de 2016 y desde entonces se ha hecho un hueco en el mercado de la cosmética ecológica. Todo parte de las plantas medicinales que Pamela Pardiñas Lira cultiva y recolecta en O Valadouro (Lugo) para posteriormente elaborar sus propios productos en el laboratorio que tiene en Burela.

Esta licenciada en química estaba dando clases particulares cuando, hace ocho años, hizo un curso de plantas medicinales y descubrió su aplicabilidad en cosmética. Pardiñas comenzó a investigar hasta que llegó a la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps), donde obtuvo gran cantidad de información y acceso al reglamento. La lucense se enamoró de la posibilidad de poder crear sus propios productos e inició un proyecto con el que ha logrado llevar la naturaleza a la piel de mucha gente.

La materia prima, de cultivo propio

"Sempre estiven bastante interesada na cosmética e érame moi complicado atopar cousas que non fosen moi sintéticas", explica Pardiñas sobre sus inquietudes. Conocer que era posible elaborar productos a partir de las plantas que ella misma cultivaba le pareció una idea perfecta y decidió apostar por un proyecto en el que lo natural va directo a la piel.

Algunas de las plantas recolectadas para usar en los productos de Argaia (Cedida).

Los productos de Argaia están elaborados con la materia prima que Pamela Pardiñas y su compañera Estefanía cultivan en ecológico. Lavanda, romero, tomillo… son muchas las plantas medicinales que la marca cuida para poder obtener unos cosméticos de primera calidad. "É unha das partes que máis me gusta do traballo, coidar das plantas, e tamén fabricar os produtos", explica la responsable de Argaia. El hecho de que la marca cultive su propia materia prima evita, además, traslados y transportes innecesarios y convierte la cosmética de la firma en kilómetro 0.

La materia prima se cultiva en O Valadouro y se traslada a Burela, donde se sitúa el laboratorio. La sala de pesadas es el lugar de almacenamiento de las plantas que Argaia usa para sus productos, y también el sitio donde se pesan. "É como cociñar", describe Pardiñas sobre el proceso de elaboración. Así, si lo que se quiere es hacer una crema facial con aceites, se debe poner a fuego lento para que se derritan las mantecas o ceras sin que alcance una temperatura muy alta para que no pierdan propiedades. Una vez enfría, se le añaden los aceites esenciales para darles el aroma.

El desodorante de Argaia Biocosmética (Cedida).

La impulsora de la marca se encarga de controlar cada parte del proceso de elaboración, desde el cultivo hasta los macerados y el envasado, lo que supone una garantía de calidad. Esto también facilita que los productos sean lo menos perjudiciales posible tanto para las personas como para el medio ambiente. "Hai ingredientes dalgúns cosméticos que son sospeitosos de non ser inocuos", explica Pardiñas. Esto la llevó a apostar por la cosmética natural, en la que se emplean los ingredientes mínimos procedentes de las plantas para obtener el producto y emulsionantes para estabilizarlo.

Los productos de Argaia Biocosmética

Los productos de Argaia Biocosmética se dividen en cinco líneas: facial, capilar, corporal, infantil y solar. "O primeiro que se creou foi o ungüento. A idea de ter o meu propio laboratorio xurdiu pouco antes de quedarme embarazada, así que o primeiro produto que fixen foi para usar coa miña pequena", explica Pardiñas.

El ungüento de Argaia Biocosmética (Cedida).

La línea capilar se centra en champús sólidos y la emprendedora trabaja ahora en la creación de una mascarilla capilar sólida que prevé sacar a la venta antes de que termine 2020. El hecho de que la marca promueva este tipo de cosmética y emplee vidrio o aluminio para sus envases tiene un objetivo claro: huir del plástico. Actualmente, solo el gel de baño tiene este material y Pardiñas está buscando un proveedor para poder cambiarlo a un envase más sostenible.

Argaia también ofrece al consumidor la posibilidad de adquirir otros productos como pasta de dientes sólida, bálsamo labial, limpiador facial o agua micelar dentro de su línea facial, así como desodorante, gel de ducha, crema o aceite dentro de la corporal. Y entre una oferta tan amplia, ¿cuáles son los más demandados? La pasta de dientes semisólida es, junto con el contorno de ojos, uno de los productos más vendidos y supuso una gran labor de investigación y testado para lograr el resultado final.

Varios de los productos de Argaia (Cedida).

Los productos de Argaia son unisex, aunque la mayor parte de las compradoras son mujeres mayores de 30 años, y pueden ser utilizados por personas con todo tipo de pieles porque los ingredientes son fundamentalmente aceites vegetales y aguas florales. La marca gallega dispone, además, de distintas cremas faciales para pieles secas o mixtas, por ejemplo. "A xente con dermatite atópica usa o ungüento é vaille moi ben. É multiusos, porque leva caléndula e manzanilla, así que úsano dende para as úlceras ata para curar os pircings ou as tatuaxes", indica Pardiñas.

Una imagen de los productos de Argaia (Cedida).

Argaia vende sus cosméticos ecológicos a través de la web, aunque el canal de venta favorito son las tiendas. Pardiñas defiende la importancia del comercio local y, de hecho, distribuye los productos de su marca en pequeños negocios de todo España, aunque la mayor parte están situados en Galicia. Así es como Argaia Biocosmética se ha convertido en apenas cinco años en una opción única las personas que apuestan por una cosmética natural, ecológica y sostenible.