Actuación de La Vida Moderna aen el Coliseum de A Coruña en u

Actuación de La Vida Moderna aen el Coliseum de A Coruña en u Leo López – EMHU

Cultura

‘La Vida Moderna’ revoluciona el Coliseum de A Coruña con su particular humor irreverente

David Broncano, Héctor de Miguel (Quequé) e Ignatius Farray con la bandera de su país inventado Moderdonia por delante, hicieron reír a centenares de asistentes durante más de dos horas con su humor absurdo y surrealista

7 mayo, 2022 10:08

El Coliseum de A Coruña vivió este viernes una noche típica prepandemia, con multitud de público asistiendo a un gran espectáculo, posibilidad de consumir durante la función y la no obligatoriedad de mascarillas. Unas 4.000 personas se reunieron para disfrutar de uno de los platos fuertes del Encuentro Mundial de Humorismo de A Coruña (EMHU): La Vida Moderna Live Show, o lo que es lo mismo, David Broncano, Héctor de Miguel (Quequé) e Ignatius Farray. Los dos últimos hicieron su entrada triunfal en escena subidos en una moto de alquiler.

Este exitoso formato ha ido evolucionando positivamente desde que naciese hace años para ser un programa estival que supliese la ausencia por vacaciones de las grandes voces de la Cadena Ser y a día de hoy es todo un fenómeno. Lo más característico del espectáculo es el humor sin filtros que apunta a todo y todos, improvisaciones con la participación del público (al escenario del Coliseum subió una vecina del Ventorrillo), recogidas de cable y hasta desnudos.

David Broncano, Héctor de Miguel (Quequé) e Ignatius Farray frente al público del Coliseum (Leo López).

David Broncano, Héctor de Miguel (Quequé) e Ignatius Farray frente al público del Coliseum (Leo López).

"Hacía años que no veníamos a Galicia, sois la mejor gente de España con banderas de Moderdonia (el país independiente fundado por los creadores de este show de humor)", dijo Broncano al salir al escenario, a la vez que preguntó si había en el Coliseum "alguien das Rías Baixas, da miña terra" (se fue de Galicia con un año y creció en Jaén). "Chove no pobo, es lo único que sé decir en gallego", bromeó, a la vez que mostró su sorpresa porque la torre de control del aeropuerto coruñés de Alvedro esté patrocinada por Estrella Galicia.

"Gracias por dejarnos ser tu relación tóxica favorita"

El show comenzó con una intervención individual de Broncano (ataviado con un chándal blanco y negro personalizado para La Vida Moderna), a su vez presentador del programa de entrevistas ‘La Resistencia’, en el que analizó "frescos barrocos", en alusión a imágenes que se iban proyectando en la gran pantalla del escenario. En una de ellas aparecía él mismo con una mezcla impensable de gente como Sebastian Yatra, Esther Expósito, María Pombo, Almeida, Ayuso, Figo o Feliciano López en el Máster de Tenis de Madrid 2021. Otra de las imágenes fue la de una pequeña excavadora intentando sacar a un barco encallado, lo que el humorista comparó con el Deportivo y la Segunda División.

A continuación, presentó a Ignatius y Héctor de Miguel como "os nenos da comedia" para que entrasen a escena a bordo de una moto y con ‘Bella Ciao’ de fondo junto a aplausos del público. "Parece un mitin de UPD pero en ellos nunca hubo tanta gente", bromearon. En esta actuación cumplieron una de las promesas que le habían hecho a los seguidores del formato, hablar del corazón de cerdo que recientemente fue trasplantado a un hombre, para lo que mostraron peculiares noticias sobre el tema como que el varón había sido condenado por apuñalar a otro o hasta la información difundida por un diario gallego de que los médicos usaron cocaína para el trasplante.

También hubo espacio para referencias a políticas como las burlas a la foto de Pablo Iglesias con su cartera de vicepresidente segundo del Gobierno "como un niño el primer día de colegio", las tradicionales marchas mañaneras de Rajoy, la falta de trabajo de Albert Rivera en su antiguo bufete de abogados y no faltó Alberto Casero, al que presentaron como "el nuevo Che Guevara", al ser el diputado popular gracias al cual salió adelante la reforma laboral porque se equivocó en un botón. "Gracias por dejarnos ser tu relación toxica favorita", se dirigieron al público para agradecerles la asistencia. A su vez, también hubo alusiones a Pedro Sánchez, la ley mordaza, la ley de eutanasia, el "fachaleco" o el "unboxing" de Franco del Valle de los Caídos.

Uno de los momentos más surrealistas se vivió cuando Ignatius decidió acabar uno de sus "discursos" bajándose los pantalones y quedándose desnudo de cintura para abajo ante el público. Pasados unos minutos de revuelo y risas entre los espectadores, el "Ministro de Cultura Héctor de Miguel" desarrolló su sección ‘Grandes respuestas’. "Nos gusta tirarnos al fango, jugar con los límites y defiendo el humor primario, original, el humor básico", comentó. Dio paso a respuestas en redes sociales a tuits destacados de marcas, políticos o escritores como publicaciones de Rajoy, Rufián, Pérez Reverte o Cruzcampo, además de proyectar un vídeo de un momento "tierra trágame" de una reportera de una cadena local en la Lotería de Navidad.

El público del Coliseum durante La Vida Moderna (Leo López).

El público del Coliseum durante La Vida Moderna (Leo López).

En la sección ‘Familias’, los humoristas interrogaron al público sobre si alguien tenía alguna historia familiar curiosa que comentar y desde las gradas del Coliseum una joven del barrio coruñés Ventorrillo salió corriendo al escenario. Una vez allí, dejó a Broncano y de Miguel sin palabras al contarles que "a su hermana la habían dejado embarazada borracha y que en unos meses habría un aguacatito en la familia", además de que recientemente ellas habían conseguido las entradas para asistir a La Resistencia en Madrid. Antes de abandonar el escenario, la gallega se enfrentó en una particular "batalla" con Ignatius que le dejó tendido en el suelo.

Los momentos más reivindicativos se vivieron al final de la actuación con una reflexión de Ignatius marcada por la política en la que criticaba que se hiciese creer en general desde las últimas elecciones que "la libertad era poder tomar dos cañas y unas bravas", al mismo tiempo que jugó con la idea de fundar su propio partido político AINS (Aburrimiento, Incesto, Necrofilia y Suicidio). Al final del show los integrantes de La Vida Moderna recibieron una ovación del público que se puso de pie y se despidieron proyectando en la pantalla una imagen con sus rostros y de fondo su original bandera de Moderdonia.