La comunicadora coruñesa que ha trabajado en diferentes programas de la Televisión de Galicia como Acompáñenos, Luar, Eu Quero ser o Quen anda aí compagina ahora su labor tras los focos en Land Rober con el estreno de una obra de teatro junto a su compañera Eva Iglesias.

Nais es una obra teatral que narra la historia de dos mujeres envueltas en una loca comedia y que acaba de comenzar a girar por nuestro territorio.

Eva y tu sois dos comunicadoras natas que captáis la atención de los espectadores…¿Cómo le resumís al público lo que se van a encontrar en NAIS?

Creo que la gente necesita reírse, desconectar y volver a vivir. La vida es maravillosa y creo que hemos aprendido a valorarla más, ojalá nos dure. Si tuviera que resumir NAIS con una palabra sería DIVERSIÓN. 75 minutos para dejar aparcados los problemas del trabajo, el precio de la gasolina, las guerras (esto es más difícil de olvidar)…  y dejarse llevar por el disparate. La risa es una terapia fantástica. Son dos mujeres (Carla y Elena) muy diferentes, que afrontan la maternidad de manera totalmente opuesta. Se conocen por casualidad y se van encontrando en diferentes etapas de la vida. Si el primer encuentro es una locura, la cosa va de mal en peor pero, cuidado, porque a veces dos personas tan diferentes pueden estar mucho más cerca de lo que creen. Me parece una moraleja maravillosa. Eso es NAIS, una comedia disparatadamente maravillosa. Yo recomiendo a todo el mundo que vaya a verla, merece la pena.

¿Cómo se cocinó este nuevo proyecto?

Pues como tantas veces en esta profesión, este proyecto nació de una crisis personal. Acababa de dejar un trabajo maravilloso que me encantaba pero necesitaba parar un poco después de un año y medio complicado a nivel laboral pero la paz no va mucho conmigo. Al poco tiempo ya estaba pensando en hacer algo diferente y recuperar otra de  mis pasiones: el teatro. Había leído la obra “Nais” hace mucho tiempo, de hecho llegué a representarla hace años. Al coger el texto de nuevo pensé inmediatamente en Eva Iglesias. Uno de los personajes “era ella” y tenía muchas ganas de que hiciésemos algo juntas. Hablé con Destino Bergen y tardaron minuto y medio en decirnos que sí, que adelante, que si creíamos en el proyecto, ellos lo harían posible y aquí estamos, cumpliendo lo que para mi es un sueño.

¿Cómo es trabajar con Eva Iglesias? 

Trabajar con Eva es una fantasía. No tiene filtro y eso es parte de su magia. Brilla y hace brillar a todos los que tenemos la suerte de estar cerca de ella.  Hacer cualquier cosa a su lado es un regalo. Y eso que por su culpa me tocó hacer el papel más serio. En casi todas las comedias de este tipo hay un papel más divertido y otro más comedido, darle a Eva el comedido no tendría sentido. Así que me toca ser la “sosa” pero yo de sosa tengo poco, creo (dice entre risas).

¿De qué forma os ha afectado la pandemia?

Pues muchísimo. Estuvimos varias veces a punto de estrenar pero el miedo a tener que cancelar actuaciones, la poca seguridad de poder tener una continuidad….retrasó todo mucho. Pero más vale tarde. Hubo momentos en los que perdimos motivación porque no veíamos el día de poder probar delante del público pero después del otro día, vamos con las pilas cargadas y espero que podamos recorrer Galicia entera haciendo reír. 

Pantalla, dirección de redacción, teatro ¿Cambia mucho el método de trabajo de un medio a otro? ¿Qué proyecto te apasiona más?

Son medios muy diferentes pero en realidad comparten lo más importante: el público. Los que nos dedicamos a comunicar, de una forma u otra, solo buscamos que haya gente que disfrute con lo que hacemos. En el teatro quieres salir y que la gente se ría, se lo pase genial… lo mismo que cuando te pones delante de una cámara. Lo único que cambia es que en el teatro les ves las caras, y eso “acojona” más. En sus casas pueden reír o no pero no los ves (risas). 

Haces teatro desde hace muchos años  ¿Cuándo dijiste aquello de “mamá quiero ser artista”?

(Risas) Eso lo llevo diciendo toda la vida y hasta lo canté con Concha Velasco en una entrevista que le hice. Realmente, si lo pienso bien, eran los demás los que decían que tenía que ir para artista porque, según decían, era muy espabilada y  tenía mucho arte. A mi siempre me llamó la atención el mundo del teatro. Subirse a un escenario tiene una parte mágica que no se puede comparar con ninguna otra sensación. Yo recomiendo hacerlo al menos una vez en la vida pero estoy segura de que el que prueba, repite, así que mucho cuidado. 

El teatro nos permite soñar de una manera mágica ¿Con qué sueña Inma Morandeira?

Yo tengo todo para ser feliz: una familia maravillosa, unos amigos fantásticos, un trabajo que me encanta, un pisito mono… Pero como hablamos de soñar, sueño con tener mi propio programa de entrevistas. Me encantaría poder dirigir y presentar mi propio espacio televisivo. Disfruto poniéndome delante de una cámara y dirigiéndome a quién me quiera escuchar. No me quiero poner profunda pero me gustaría que la experiencia sirviera para algo y que se juzgara más por las capacidades y menos por las arrugas o las canas. Creo que en ese sentido esta profesión es muy injusta, sobre todo con las mujeres. Mi sueño está claro: Quiero (seguir) siendo artista.