Más de 2.200 mayores de 65 años están matriculados en las universidades gallegas este curso
La conselleira de Política Social habló hoy en una jornada organizada por la Federación Galega de Asociacions Universitarias Séniors sobre la necesidad de dar solución a los problemas que afectan a la tercera edad, como la brecha digital
11 marzo, 2022 17:25SANTIAGO DE COMPOSTELA, 11 Mar. (EUROPA PRESS) –
La conselleira de Política Social, Fabiola García, ha señalado este viernes que más de 2.200 personas mayores de 65 años están matriculadas en alguna de las tres universidades gallegas. García ha comentado este dato durante su intervención en la jornada de apertura de Diálogos Universidade-Maiores no século XXI organizada por la Federación Galega de Asociacions Universitarias Séniors (Fegaus), donde también ha hablado sobre la demanda de más opciones, por parte de la tercera edad, para vivir esa etapa vital "con total plenitud".
Durante el acto, la titular de Política Social ha insistido en la necesidad de escuchar las preferencias de las personas mayores sobre dónde y cómo quieren llevar a cabo sus proyectos vitales. Además, ha recordado que por parte de la Xunta se trabaja en la creación de un Consello do Maior que aglutine estas reclamaciones y proponga iniciativas que favorezcan el envejecimiento activo.
La conselleira ha apostado por reforzar la colaboración con entidades como Fegaus y con las universidades para dar respuesta a estas demandas. Asimismo, también ha señalado la necesidad de dar solución a otros problemas que afectan a la tercera edad como la creciente brecha digital.
Aulas Cemit
En un comunicado, la Xunta ha recordado que, desde 2011, se puso en marcha el proyecto de Aulas Cemit para formar a las personas mayores en competencias digitales. Según señala el Ejecutivo gallego, en la actualidad existen cerca de 100 centros por toda Galicia que ofrecen este servicio y en los que participan más de 104.000 mayores.
Además, el Gobierno gallego ha puesto en valor la colaboración con entidades como Fegaus, con la que pone en marcha programas de digitalización en zonas rurales y en las ciudades a través de ayudas con cargo al 0,7% del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), de la que recibió cerca de 200.000 euros en el último año.