Puerto de Celeiro y su buque insignia, la Merluza del Pincho
La Merluza del Pincho de Puerto de Celeiro es uno de los productos más respetados y valorados en la gastronomía gallega. Detrás de este éxito se esconde un compromiso con la calidad, la transparencia y la defensa por el ecosistema marino.
2 septiembre, 2021 06:00Hablar del Puerto Celeiro es hablar de uno de los puertos más importantes tanto en volumen de pesca como en ventas, del sello de Galicia Calidade, de la pesca sostenible y de la mejora constante en sus servicios. Un mecanismo bien ensamblado que sigue apostando día a día por el perfeccionamiento para ofrecer un producto fresco de gran calidad y un servicio más satisfactorio para el cliente.
Desde la creación del grupo Puerto Celeiro S.A , y a lo largo de casi tres décadas, este puerto emplazado en el pequeño pueblo pesquero de Celeiro ha ido creciendo y evolucionando hasta posicionarse como un referente a nivel tanto nacional como europeo, sin tener nada que temerles a otros de mayores dimensiones.
Actualmente es un elemento fundamental en el motor económico de Galicia, y así lo avalan los datos. A pesar del Brexit y de la difícil situación que ha provocado la pandemia, desplomando el precio de venta de la merluza, al cierre del año 2020 se subastaron 14908 millones de toneladas con una facturación que ascendía hasta los 44.38 millones de euros. Haciéndose con un 30% de la producción española de merluza en aguas europeas, sin descuidar la pesca y comercialización de otros productos.
Son varias las claves en las que se sustenta el éxito de este puerto y que se traduce en un producto destacado y apreciado como la Merluza del Pincho. Detrás del producto estrella hay un gran trabajo de constante renovación e innovación que genera un beneficio social, económico y medioambiental.
Las claves del éxito de la merluza de Celeiro
Una de las razones del éxito de este puerto ha sido su especialización apostando por uno de los pescados más consumidos en los hogares españoles. Entre las diferentes especies subastadas en la lonja, la merluza representa un 86,91% de la facturación.
Esta apuesta por ofrecer un producto de gran demanda, rivalizando con grandes productores, provoca una constante búsqueda por la calidad y la distinción, aunando innovación y experiencia, para lograr destacar en el sector pesquero. Eduardo Míguez, director adjunto del Puerto de Celeiro, y actual presidente del Comité de Productos del mar, destaca “Queríamos que nuestra merluza no fuera un granel, un genérico, que fuera una merluza diferente. Ya en el año 95-96 empezamos a trabajar en diferenciación, en marca, pero no solo marca por marca porque al final la publicidad tiene los días contados y si tu no lo acompañas con calidad y con las cosas bien hechas, eso al final se cae. Empezamos a trabajar haciendo cursos con personal, embarcamos biólogos y les empezamos a decir a gente, con un montón de tradición y años de experiencia, pequeñas cosas que se podían mejorar (…) . Yo siempre digo, toda la calidad del producto la tiene en el mar y luego en el camino lo único que va haciendo es perdiéndola. Lo que tenemos que hacer es que en el camino pierda el mínimo de calidad posible ”.
Los primeros pasos fueron decisivos, seleccionando artes de pesca más respetuosos tanto con el producto como con el ecosistema marino, “Fuimos orientando nuestra flota, que tenía un poco de todo, al tema del palangre porque nos parecía un arte mucho más selectiva, aunque es más intensiva en trabajo, lleva más trabajadores, nos parecía que era mucho más artesanal.” En el palangre la merluza se pesca mediante anzuelo. En estas condiciones favorables, su rígor mortis es diferente, las escamas no resultan dañadas y la firmeza de su carne es mayor al no recibir ningún golpe en su captura.
A pesar de usar, también, las técnicas de volanta (pesca con redes) con buenos resultados, la estrella del puerto de Celeiro es la Merluza del Pincho, pescada individualmente en los caladeros de Gran Sol y tratada de forma única.
Pero su éxito no solo radica en un producto de excelentes cualidades, sino en la constante observación de las necesidades del comprador. “Ahora hay un cambio de mercado. Desde hace años, en Europa, tú vas a un supermercado y está en filetes, en rodajas y en bandejas, listo para ser cocinado. Hace muchos años el cliente español no quería filetes en una bandeja, prefería un producto entero. Pero ahora, desde que está cambiando un poco el tipo de cliente, la gente joven ya no tiene tanto tiempo ni quizá sepa hacerlo”. El presidente del Comité de Productos del mar destaca los cambios en las tendencias de consumo de los usuarios, que se han acentuado a raíz de la pandemia. Desde Celeiro intentan satisfacer esas nuevas casuísticas que han ido surgiendo, favoreciendo nuevos métodos de tratamiento del producto.
Puerto de Celeiro S.A, creación pionera
Puerto de Celeiro comenzó siendo una cofradía de pescadores y nace como fruto de un cambio de paradigma en los puertos de Galicia. La Xunta convierte en funcionariado a la plantilla de trabajadores de las cofradías, dejando de desarrollar ciertas actividades mercantiles necesarias para la venta del producto en las lonjas.
En 1994, para solventar las complicaciones producidas por la nueva dinámica se optó por una solución pionera en esos momentos, unir esfuerzos y, a través de la unión de varios armadores con aportaciones de capital, crear Puerto de Celeiro S.A. Una empresa encargada de gestionar todas las actividades mercantiles del puerto como concesionaria de la lonja.
Para ello, decidieron no solo abordar la construcción de una nueva lonja, sino abarcar otros problemas originados por la crisis económica del año 1993. Con el objetivo de atacar los costes de explotación, mejorando tanto los servicios como la competitividad, se crea un grupo de empresas con la finalidad de diversificar actividades y de proporcionar todos los servicios que la flota, el puerto o la distribución requieren a un menor coste.
Actualmente, el grupo factura entorno a los 90 millones de euros anuales, posicionándose en el ranking de las empresas con mayor facturación de la provincia de Lugo, convirtiéndose en un claro motor socioeconómico de la costa lucense.
“La pandemia vino para revolucionar el online”
Desde sus inicios, Puerto de Celeiro se ha caracterizado en sus tomas de decisiones pioneras en el sector pesquero, yendo siempre un paso por delante. Sus buenas decisiones los preceden y por ello no han dudado en situarse en la vanguardia tecnológica, enfrentarse a la revolución digital o adaptarse a las necesidades del cliente de hoy.
Aprovechando las nuevas tecnologías han mejorado sus infraestructuras y convertido su flota en una de las más modernas. Además, han querido exprimirlas al máximo para implementar nuevas formas de comercialización a través del mundo digital. Por ello, en los próximos meses saldrán a la luz, tal y como los denomina Eduardo Míguez, “dos revoluciones digitales”.
Tomando impulso desde el confinamiento donde muchos usuarios de todas las edades echaron mano del móvil para realizar pedidos a sus pescaderos de confianza, en Puerto de Celeiro trabajan en la nueva subasta online que complementará a la presencial. Por un lado, la restauración o el comprador particular tendrán sus propias lonjas online, donde accederán a la compra del producto que se encuentra a subasta ese día. Por otra banda, los compradores profesionales podrán conocer el stock en tiempo real de cada barco, realizar pedidos, reservas o incluso subastas desde los propios barcos, con el pescado recién capturado.
Hitos en la trazabilidad del producto
“Como consumidores ya no podemos permitir que nos engañen. Debemos tener toda la información”, Así de contundente se muestra Eduardo Míguez ante los derechos del consumidor a conocer toda la información del producto. A pesar de reconocer la dificultad existente en el sector pesquero, llevan décadas trabajando en la mejora de transmisión de la información para que todos los clientes tengan pleno acceso a la trazabilidad.
Ya a comienzos del 2000 pusieron en marcha, mediante la codificación de barras, el primer sistema para el control de trazabilidad de las capturas celeirenses. Años después, en 2019, implementaron por primera vez, a nivel mundial y de la mano de Carrefour, la tecnología “Blockchain” a un pescado fresco. A través de esta tecnología el consumidor, que realizaba su compra en los establecimientos de la multinacional, podría conocer qué buque realizó la captura, además de cómo, cuándo y con qué tipo de arte.
Actualmente están trabajando en varios dispositivos para que la cadena de información no se rompa y pueda llegar a nuestros hogares. La opción que cobra más fuerza es el desarrollo de una etiqueta que iría incrustada en el pescado. Mediante código QR se podría conocer toda la vida del producto, desde que se pesca hasta que llega a nuestros comercios.
Pesca sostenible y el certificado de Friend of the Sea
En la ambiciosa estrategia de mejora y diferenciación de Puerto de Celeiro S.A se encuentra el compromiso actual de concienciación social y medioambiental. “Ya no funciona lo de salir a pescar y pescar todo lo que puedas. No, hay que pescar bien y pensar en cómo están los stocks, qué cuota tienes, lo que puedes pescar (…) Hace mucho tiempo que dijimos que lo de la “pesca olímpica”, lo de pescar lo que sea, se acabó porque ya pertenecemos a un mundo global, a una economía europea y a unas aguas que están muy controladas. Todo ese mundo ya no tiene sentido en el 2021.” asegura Eduardo Míguez.
La ONG Friend of the Sea es una de las certificadoras internacionales más rigurosas e importantes en lo referente a la protección del ecosistema marino y protección social. Para acceder a su certificación se tiene que superar unas estrictas auditorías, lo que hizo que Puerto de Celeiro se decantara por esta opción, “En aquel momento cuando nos queríamos certificar, queríamos certificar que fuera un producto sostenible, que se cumplieran todos los requisitos de pesca con ciertas artes, con cuota legal, pero también queríamos la parte social. Que se audite el tema del personal, que no vayan menores, que no haya inmigrantes ilegales, que las condiciones salariales sean dignas, que todo el mundo tenga las titulaciones y los requisitos que se necesitan para ir en un barco”, afirma Eduardo Míguez.
Este esfuerzo fue reconocido en 2018 al ser el primer producto del mar en Galicia en recibir el galardón “Premio Alimentos de España” como reconocimiento a la pesca sostenible, la trazabilidad y calidad de su producto.
“La mayor publicidad ha sido gratis”
La calidad suprema de la Merluza de Celeiro no solo es conocida en España. El actual director adjunto recuerda con orgullo como en Francia, país con una importante flota pesquera, ha reconocido abiertamente, y en varias ocasiones, las cualidades y el buen hacer del Puerto de Celeiro. El grupo encontró un gran aliado en Carrefour después de ser premiado en 2015 por sus métodos de pesca. Con el premio “Gran Reto Proveedores para el Clima” reconocía la labor del grupo por su lucha contra el cambio climático.
Esta unión entre las sociedades se hizo patente durante la crisis pandémica. En pleno desplome de los precios en las lonjas, con la restauración cerrada y muchos ciudadanos confinados, desde Puerto de Celeiro observaban como muchos armadores eran prácticamente incapaces de cubrir costes mientras que los compradores adquirían su producto a un elevado precio. Ante esta situación insostenible, Carrefour y Puerto de Celeiro dieron un paso adelante y decidieron pactar unos precios justos, tanto para los pescadores como para el consumidor final.
El reconocimiento de la Merluza de Celeiro no solo viene por parte de grandes multinacionales. Eduardo Míguez reconoce que, a pesar del lanzamiento de grandes campañas de Marketing, la última con el Resurrection Fest, su mejor publicidad viene de la alta cocina. Su producto siempre está presente en los fogones de estrellas Michelin como Pepe Solla, Lucia Freitas o la cocina de DiverXO. Además, su presencia en grandes eventos y celebraciones, como el reciente evento gastronómico "Estrellas Solidarias en el Camino de Santiago", les han concedido una alta visibilidad.
La Merluza del Pincho se ha posicionado como un producto distintivo de calidad, esfuerzo y de compromiso social, sin prescindir del respeto por el mundo en el que vivimos.