Los responsables de El beso en el Mercado Das Nubes de A Coruña.

Los responsables de El beso en el Mercado Das Nubes de A Coruña. Quincemil

Comercio

El Beso: La marca gallega de cosmética natural y meditación que anima a quererse

Javier Riestra y Marta Enríquez son los creadores de este proyecto que apuesta principalmente por cremas y bálsamos elaborados con plantas que ellos mismos recogen del campo, además de otros productos como cojines de meditación, otra de sus pasiones compartidas

10 enero, 2021 06:00

La meditación, el desarrollo personal, el autocuidado y la autosuficiencia se unen en una misma marca 100% gallega: El Beso. El alma de este proyecto son Javier Riestra y Marta Enríquez, que unieron fuerzas y conocimientos para elaborar cosmética natural elaborada con plantas que ellos mismos recogen del campo y cremas con propiedades medicinales que "promueven el amarse y aceptarse a uno mismo". Además, elaboran cojines de meditación siempre apostando por no generar impacto medioambiental y utilizando materiales que apoyan el comercio local.

Riestra lleva años haciendo elaboraciones y rescatando enseñanzas de las antiguas yerberas, "recetas ancestrales de las abuelas" como él mismo las define, aparte de que se declara un apasionado de la cosmética natural y crea cremas y jabones. Sobre este campo aprendió mucho en las ecoaldeas donde ha vivido en diferentes puntos de Galicia y antes de llamarse El Beso, la marca existía con otro nombre y la llevaba solamente él, pero al unirse con Marta decidieron dar un giro a la idea y desde ese momento ya han pasado dos años y medio.

"Nuestro eslogan es el beso para el amor y la aceptación", aseguran, mientras detallan que disponen de una gran gama de bálsamos y pastas dentífricas elaboradas por ellos a base de macerados de plantas que recogen del campo y que maceran durante 40 días o un ciclo lunar para que finalmente la planta deposite el principio activo en el aceite que luego mezclan con cera de abeja y aceites esenciales. "La cera tiene propiedades nutritivas y los aceites aromatizan y potencian y unimos todo para crear los bálsamos", dice Enríquez.

Cuidado de las personas y nombres que evocan sensaciones

Los bálsamos de El Beso son uno de sus productos estrella y tienen labiales, faciales…además de un ungüento curativo "tipo antiinflamatorio" y otro corporal "para emplear todos los días después de la ducha o para un masaje", apuntan los responsables de la marca. En esta línea, los diferentes productos tienen nombres que van en consonancia con las sensaciones que producen.

Nilo porque "el mundo de la cosmética nació en Egipto", Flor de Azahar "debido al aroma que tiene la crema debido a que es la flor del naranjo dulce", Corazón rojo "en alusión al color de la crema y porque es buena para el corazón", Sol y Luna "al tener sándalo, un tipo de madera del árbol que lleva el mismo nombre, y la flor de lavanda que trabajan con las energías y los polos". Las cremas dentífricas también aluden a su sabor, por ejemplo Meditación en el Ártico es debido a que se trata de "una crema muy fresca a base de eucalipto y menta", la de Aromas de Oriente está hecha con canela y benjuí "que le san un sabor especiado" y Espíritu cítrico tiene como elementos la principales la mandarina y el pomelo.

Otros de los productos de El Beso son los raspadores linguales ayurbédicos, forjados por un amigo artesano de Javier y Marta y hechos con cobre, un material del que destacan que es "un metal noble bactericida que activa el sistema inmune". Todas estas propuestas que forman parte de su oferta van en línea con la filosofía de El Beso de cosmética natural y sus creadores animan a consumir este tipo de cosmética porque "es respeto hacia la salud de la piel, además de que promueve la autosanación y se aleja de marcas convencionales del sector que utilizan derivados del petróleo o químicos", subrayan.

"Las grandes industrias cosméticas quieren generar comercio y en general no se preocupan tanto por cuidar a las personas", critican, a la vez que hacen hincapié en que "con una crema natural la piel y el cuerpo van a responder mucho mejor porque fomentan que el cuerpo se regenere a sí mismo", aclaran.

Precios populares y apuesta por el textil

Enríquez cuenta que ella viene del mundo textil y como le apetecía hacer algo relacionado con este sector, unió este deseo con su pasión por la meditación, lo que dio lugar a hacer cojines para meditar. Los tejidos provienen de una tienda que vende stocks, porque en el Beso no producen nada que no esté ya en el planeta y hacen todo el proceso en un taller de Arteixo. Por su parte, la cinta de estos productos "es de una mercería de toda la vida" y las etiquetas las hacen en Carral para así promover "el impacto cero con productos locales, artesanos y naturales", afirman orgullosos.

De momento El Beso no tiene web propia y los interesados en hacerse con sus productos pueden hacerlo mediante encargos por mensaje privado a través de instagram, facebook o mail. Las personas que residan en A Coruña o alrededores tienen la posibilidad de entrega en mano y los clientes del resto de España recibirán sus pedidos por correo. Los precios son populares y se mueven entre los 10 euros que cuesta el bálsamo labial y los 25 del corporal, todo elaborado a mano cuidadosamente.