El incendio de dos autobuses urbanos, así como numerosas averías en los últimos meses, han llevado al transporte compostelano a una situación muy precaria, en la que pocos vecinos se sienten cómodos. Ante la imposibilidad de sacar una nueva licitación del servicio en el futuro próximo, el Ayuntamiento ha decidido alquilar nuevos vehículos.

En concreto serán once, tal como ha detallado esta mañana el Gobierno local. El alquiler se hará mediante la modalidad de leasing, que permite un arrendamiento de larga duración con opción a compra.

De acuerdo con el concejal de Mobilidad, Gonzalo Muíños, las reuniones sobre el estado de los autobuses se han intensificado en el último año. El edil calificó la flota como "envellecida" aunque detalló que no dista de la media estatal. "Mentres a flota de Santiago ronda os doce anos e medio, a media estatal sitúase nos once", señaló. Con todo, el titular de Mobilidade en el Ayuntamiento insistó en que "o importante é ofrecer, no menor prazo posible, unha solución para que a veciñanza conte cun servizo de transporte acorde as súas necesidades".

Los 11 vehículos sustituirán a los que vayan dando más problemas, aunque desde el gobierno local apuntan que "todos contan coa súa ITV e son revisados ao remate de cada xornada" y por tanto "todos os que están circulando, están en condicións de prestar o servizo de transporte público".

Se prevé un plazo de entre un mes y dos meses para que estos autobuses comiencen a circular, siendo la mayoría de ellos nuevos. Todo ello a la espera de que el órgano estatal dé el visto bueno para sacar a concurso la próxima licitación.