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El pueblo a un paso de A Coruña que hizo del mejillón su buque insignia
Miles de personas visitan cada año este pueblo situado en la parroquia de Dexo para disfrutar de este delicioso producto del mar
4 febrero, 2024 05:00Lorbé es un pueblo situado en la parroquia de Dexo, en el Concello de Oleiros (A Coruña). El puerto pesquero, que se encuentra en un enclave idílico entre los acantilados del Monumento Natural de Dexo-Serantes y las primeras playas de la ría de Sada, es su punto más destacado. En esta zona cultivan su famoso mejillón que atrae a miles de turistas a la localidad.
Cabe destacar que el puerto de la localidad se desarrolló en la segunda mitad del siglo XX gracias a un gran depurado de mejillón existente. Además, numerosas embarcaciones fueron concentrándose allí por el declive de otros muelles como los de Santa Cruz o Mera, donde prácticamente ya no hay actividad.
Aunque Lorbé tiene una población pequeña, de 776 personas actualmente, tiene una gran afluencia de gente especialmente en la época de verano. Además de la gastronomía, el pueblo ofrece otros atractivos turísticos como dos iglesias o la torre de Lorbé, que merecen la pena ver si realizamos una visita.
El mejillón como producto estrella
El mejillón es sin duda el producto estrella de Lorbé. Muchas personas visitan la localidad solo por disfrutar de este manjar en alguno de los restaurantes próximos al puerto. Este bivalvo se cultiva también las Rías Baixas, pero aquí tiene unas características diferentes: "En esta zona comen más plancton, por eso son más grandes y tiene más sabor", cuenta Pepe de Casa Méndez.
Este restaurante fue el primero que lo empezó a servir en la localidad: "Mi abuela los empezó a hacer cuando se instalaron las bateas. Luego la gente que trabajó con ella empezó a abrir sus propios restaurantes".
Ahora Lorbé cuenta con una amplia oferta gastronómica en la que este producto es el gran protagonista: "Nosotros de lo que vendemos un 80% puede ser mejillón", explica Francisco Abelairas de A’Cortiña de Lorbé. Para el hostelero la clave es que en la zona "se cría mucho más lento". "A lo mejor en las Rías Baixas sacan dos producciones al año, pero aquí solo una", añade.
En los restaurantes de Lorbé se puede probar el mejillón de distintas formas, al vapor, rebozado o en escabeche: "Es un producto súper versátil, aparte tiene un aporte calórico muy bajo y lo puedes cocinar como quieras", señala Francisco. Por su parte, Pepe recuerda que en Casa Méndez tienen una receta estrella, mejillones en salsa, que empezó a hacer su abuela.
Turistas de todo el mundo
Lorbé es un pueblo que está muy bien situado. Allí termina la Vía Ártabra, lo que lo convierte en uno de los lugares mejor comunicados del municipio. También pasa por la localidad la carretera que une Mera y Sada. Esto hace que la localidad reciba a muchos visitantes de zonas cercanas, pero también a turistas de todas las partes del mundo.
"Esto empezó en los años 70 con el delfín Nina. Vinieron Félix Rodríguez de la Fuente y Jacques Cousteau, y empezó a venir mucha gente de todas partes", recuerda Francisco. Los visitantes paraban a comer en los restaurantes locales y disfrutaban de su producto más icónico. Más de 50 años después la localidad sigue recibiendo la visita de madrileños o franceses, que lleva a los restaurante a "triplicar la facturación en verano", como comenta Francisco.
Fiestas gastronómicas y un dulce icónico
La tradición mejillonera y marisquera de la zona también protagoniza sus fiestas. Cada año se celebra la fiesta del mejillón durante el Carmen, un evento que reúne a cientos de personas que disfrutan de la degustación de este producto. Además, a mediados de noviembre se celebra cada año la Festa da Centola, que lleva ocho ediciones y que cuenta con una gran aceptación.
Después de disfrutar del mejor producto del mar, podemos pasarnos por una panadería histórica para tomar el postre: la torta de Lorbé. En Panadería Lorbé preparan este dulce que se ha popularizado como larpeira. Gumersindo Porto y María Montero abrieron este establecimiento en 1947 que hoy en día regenta la nieta del matrimonio, María García, junto a su marido, Áxel Pérez.
"Las cosas con amor salen bien. El amasado hay que hacerlo de forma muy minuciosa, si te despistas un poco puede salir todo mal. Queremos que la torta esté altita y esponjosa", contaba el pastelero a Quincemil sobre las claves de este postre.
Sin duda Lorbé es una de las grandes joyas a visitar en el área de A Coruña. Un lugar perfecto para los amantes de la gastronomía en el que podemos ponernos las botas mientras disfrutamos de un entorno lleno de encanto.