En junio del año pasado nos acercamos hasta el local de La Teresa, en la calle Capitán Troncoso de A Coruña, para charlar con Diego y Roi Lis. En aquel momento, estos dos hermanos hosteleros se planteaban un verano repleto de citas festivas que iban a llenar su local. Sin embargo, hoy, casi un año después, el panorama es bien distinto. El coronavirus ha cambiado por completo sus planes.

Cuando estaban a punto de comenzar la época fuerte del año, con la llegada de la Semana Santa, la crisis sanitaria del coronavirus les obligó a bajar la persiana. "Fue un palo", dice Diego.

El viernes 13 de marzo La Teresa cerró sus puertas y así permanecerán al menos, hasta el 25 de mayo. Descartan abrir en la Fase 1, a partir del 11 de mayo, porque "solamente con el 50% de terraza y domicilio, los números nos nos salen", comenta Diego.

"Queremos abrir el 25 pero siempre con garantías para el cliente y para nosotros. Si vemos que el 25 se nos echa el tiempo encima, no nos importa arrancar una o dos semanas más tarde", afirma este hostelero, quien espera conocer en detalle cuáles son los requisitos que tienen que cumplir más allá de la limitación de aforo. "Está todo muy en el aire, tenemos muchas dudas de como será el regreso", añade.

En La Teresa "somos anti mamparas". "Creemos que con el distanciamiento y cumpliendo estrictamente las medidas de higiene es suficiente", asegura Diego, quien ya nos avanza que, de tener que abrir al 50% de su ocupación, podrían disponer de unas cinco mesas en el interior y otras cuatro en terraza.

Terraza de La Teresa La Teresa

Una carta especial para pedir a domicilio

Al tener el local a medio llenar, estos hosteleros ya están valorando cómo "completar" la facturación. Y lo harán ofreciendo servicio a domicilio. Después de una primera prueba el año pasado, los platos de La Teresa llegarán a las casas de los coruñeses una vez reabran sus puertas. Eso sí, la opción de pedir a domicilio se limitará a una pequeña carta que están elaborando estos días.

"Estamos viendo qué platos de la carta pueden ser presentables en un take away. Evidentemente un pescado del día con un wok de verduras no va a estar en take away", explica Diego. "Será una carta cortita, fácil de elaborar y que se pueda compartir en casa", añade.

¿El futuro? Diego lo define en una palabra: incertidumbre. "Vamos a jugar con una baraja muy distinta y sin conocer el juego", comenta este hostelero. En La Teresa hay "ganas de volver a abrir", pero ante todo "con seguridad" tanto para el personal como para el cliente que, tras varios meses, vuelva a cruzar la puerta de "nuestra casa".