Pura y Sergio en su puesto de castañas de la calle Real.

Pura y Sergio en su puesto de castañas de la calle Real. Picado

GastroGalicia

A Coruña ya huele a castañas: Sergio y Pura cumplen 60 años en la calle Real

Pese a la incertidumbre por el coronavirus, ambos han podido instalarse con su puesto ambulante, que anuncia la llegada del otoño a la ciudad

29 septiembre, 2020 20:27

Cada día anochece antes y el frío comienza a calar en los coruñeses, que sacan sus abrigos del fondo del armario. Es una señal de que el otoño ya está aquí. Otra señal inequívoca está en la calle Real. Allí están de nuevo Sergio Gallego y Pura Gómez, que cumplen sesenta años vendiendo sus famosas castañas.

Su puesto ambulante enseguida atrae las miradas de todos los viandantes. "Este año empezamos muy flojos, el primer día vendimos la mitad del año pasado", señala Sergio. Sin embargo, son muchos los que se paran a comprar un cucurucho. "Es una pena todo lo que ha pasado, pero por lo menos podemos estar aquí, en la calle, y no en casa encerrados", dice Pura, buscando el lado positivo.

El pasado otoño, un tuit de Manuel Rivas que los comparaba con Amancio Ortega les hizo estar en todas las televisiones. "Aquello fue una locura. Mira que compararnos con Amancio a nosotros", exclama Pura. En su esquina de la calle Real con la travesía de la Marina, junto a las piedras que conforman la parte trasera de la subdelegación del Gobierno, pasarán los próximos meses.

"El verano también fue muy malo. Vivimos de las romerías y casi no se celebró ninguna", comenta Sergio, que en época estival cambia los cucuruchos de castañas por los de helados La Ibi, el otro gran negocio familiar. Como autónomos, su trabajo no entiende de descansos, ni mucho menos de pandemias. "Mejor estar aquí que en una residencia, o en el cementerio", dice Pura.

Seis décadas en la calle Real

El puesto ambulante de Sergio y Pura es una de los grandes distintivos del otoño coruñés. Con este, serán 60 los años que llevan trabajando en una de las calles más populares de la ciudad. Sus castañas, llegadas de tierras ourensanas, han sido disfrutadas por varias generaciones de coruñeses.

Este año, además de cucuruchos hechos con periódicos viejos, Sergio y Pura incorporan mascarillas, que lucen con el logo de La Ibi, y gel hidroalcohólico. "Hay que cuidarse", dice Sergio mientras despacha otra ración de castañas asadas. Ya llegó oficialmente el otoño a la ciudad