El Rhin reabre de la mano de Mori Coffee para traer desde Brasil "el mejor café de Santiago"
El Rhin reabre de la mano de Avi Castiñeiras y Pedro Tanoira, dos jóvenes que quieren ofrecer "el mejor café de Santiago": Coffe Mori, un café de especialidad de inspiración japonesa cultivado en Brasil y tostado en Galicia que ellos mismos importan y distribuyen
17 abril, 2022 06:00El Rhin, situado el número 32 de la Rúa Nova, uno de los locales más emblemáticos de Santiago, echó el cierre 2019. Ahora reabre como cafetería, pero no servirán un café cualquiera: ofrecen Mori Coffee, un café de especialidad de inspiración japonesa que se cultiva en Brasil y se tuesta en Galicia.
Avi Castiñeiras y Pedro Tanoira, compostelano y arousano, son los dos jóvenes detrás de este proyecto: hace un año abrieron en el Mercado de Abastos el primer punto de venta de este café procedente de la Fazenda Mori, en el estado de Paraná, y ahora se trasladan para darle más visibilidad.
"Queremos seguir creciendo y trasladando la filosofía de los cafés de especialidad: el café se consume más que el vino, pero no está tan valorado; nosotros queremos hacer el mejor café de Santiago", explica a Quincemil Castiñeiras.
Aunque el café es la estrella principal, en esta nueva vida del Rhin -que mantiene la cristalera de los años 60- estará acompañado por "productos también de calidad", con pan de la panadería Muiño de Carballo o Pan da Moa y con tostadas, zumos, batidos y brunch con fruta directa del Mercado de Abastos.
El nuevo Rhin
Mori Coffee nació de la mano de Castiñeiras y Tanoira, quienes se propusieron traer a Europa el café de especialidad cultivado en Paraná por Evilasio Shigeaki, hijo y nieto y de agricultores japoneses que emigraron a Brasil, así como el de otras cooperativas de la zona.
Además de dedicarse a su distribución, en febrero de 2021 también abrieron un pequeño local en el Mercado de Abastos en el que vendían tanto sacos de café y también ofrecían café para llevar.
Sin embargo, estos dos jóvenes querían ir más allá y abrir una cafetería en la que este café de especialidad fuese el protagonista para seguir creciendo. Tenían claro que querían que fuese en el Casco Histórico de Santiago y, cuando surgió la oportunidad de alquilar el antiguo Rhin, no dudaron.
"Es un local genial y nosotros queremos mantener la esencia de bar clásico de los inicios del Rhin: es difícil heredar un sitio así, todo el mundo tiene muchas expectativas, pero nosotros queremos transmitir nuestra idea", prosigue Castiñeiras.
Así, con la misma cristalera que en sus inicios allá por los años 60, el Rhin reabrió la semana pasada con la intención de convertirse en un templo del café de especialidad, café de alta calidad que ha obtenido una puntuación superior a 80 sobre 100 de acuerdo con la escala que maneja la SCA, que mide categorías como aroma, sabor, cuerpo, equilibrio, dulzura, acidez o postgusto.
Oferta
El café es el producto estrella del local y hay posibilidad tanto de disfrutarlo allí mismo en cualquier formato como para llevar, así como de adquirir pequeños sacos para poder prepararlo en casa.
"Este café destaca por tener un dulzor natural, con notas que recuerdan a frutas amarillas como la guayaba o el mango, es algo que la gente no se espera: se puede probar sin azúcar", apunta Castiñeiras, quien detalla que no tiene demasiada cafeína y tiene una acidez "bien equilibrada".
Siguiendo la misma filosofía de este café, producido de manera sostenible, para el resto de productos se aplica el mismo criterio, apostando por la proximidad: todo el pan llega de la mano de la panadería Muiño, en Carballo, y de Pan da Moa.
A pesar de que ya no están en el Mercado de Abastos, este está presente en la materia prima de zumos y batidos, así como en los brunch que ofrecen. También hay tartas y pastelería y pronto irán incorporando diferentes cervezas artesanas.
En estas primeras semanas de actividad el horario de apertura es de 8:00 a 20:00 horas, ya que no hay mala hora para disfrutar del buen café. El local también tiene una zona habilitada para aquellos que quieran trabajar desde
La historia del café
El origen de este café se remonta a casi cien años atrás, en 1928, cuando la familia Mori, al igual que hicieron entonces muchos compatriotas, emigró desde Japón hasta Brasil, donde comenzaron a dedicarse a la agricultura.
Tras años de trabajo, en 1979 compraron una pequeña hacienda en Paraná, un estado que había pasado de producir el 28% del café del mundo a sufrir años de cosecha cero tras una gran helada que hizo que muchas plantaciones se trasladasen a Minas Gerais.
El actual propietario de la Fazenda Mori es Evilasio Shigueaki, la tercera generación de aquellos emigrantes japoneses que habían llegado a Brasil en 1928.
Aunque hasta ahora nunca había vendido su café fuera de Brasil, con el nacimiento de Coffee Mori sus cafés de especialidad, junto con los de otras cooperativas de la zona, llegan ahora a Europa.