Samuel Rodríguez, uno de los promotores de la iniciativa
Dueños de perros en A Coruña entregan 3.500 firmas al Concello para solicitar nuevas medidas
Los promotores de la iniciativa denuncian el "acoso" y "derribo" que están recibiendo cuando "son cosas lógicas las que solicitamos"
3 noviembre, 2023 12:52Un grupo de dueños perros ha entregado en la mañana de este viernes 3.500 firmas para solicitar al Concello de A Coruña nuevas medidas con el objetivo de lograr una convivencia pacífica en la ciudad. "Buscamos convivencia. Pedimos que, entre las 20:00 y 10:00 horas, los perros puedan estar sueltos en cualquier parte, siempre y cuando no molesten a nadie", ha indicado a este medio uno de los promotores de la iniciativa, Samuel Rodríguez.
En este sentido, Rodríguez ha señalado que es "ilógico" que los dueños de canes no puedan ir a las playas de A Coruña, como Riazor o Matadero, pero que sí desplazarse hasta las de otros concellos cercanos, como Arteixo o Sada. "También solicitamos multas de verdad a aquellos dueños que no recojan los excrementos o a quienes no limpien los orines", de acuerdo a la nueva ordenanza de Bienestar Animal.
En cuanto al transporte público, Samuel Rodríguez ha aclarado que "nadie está pidiendo que vayan 50 perros por autobús, sino dos mascotas por vehículo con bozal y correa, o en su defecto trasportín, al igual que ocurre en el resto de España y de Europa".
"Son cosas lógicas las que solicitamos, pero lo que estamos recibiendo es acoso y derribo con drones que nos persiguen cuando los datos de delincuencia están aumentado en la ciudad", ha lamentado Rodríguez, quien ha asegurado que lo que quiere el Concello es "multar" y "atacarnos".
"Los vecinos somos pet-friendly, pero Inés Rey no. Desde que la alcaldesa está yendo en contra de los perros, nos hemos encontrado cristales y veneno en los parque de la ciudad, y quienes lo hemos limpiado después de avisar son los dueños de canes", ha concluido.
Con la entrega de estas 3.500 firmas, los promotores de la iniciativa también buscan que la zona que bordea la costa de la Torre de Hércules hasta el cementerio musulmán sea considerada zona rural/rústica para que los animales puedan andar sueltos, con vigilancia y siendo atapados si molestan a los viandantes.
