La Federación de Asociaciones de Familiares y Personas con Enfermedad Mental de Galicia (Feafes) denuncia la dificultad a la que se enfrentan las personas que viven en el rural para acceder a los recursos de salud mental. La entidad se unió este 10 de octubre, Día Mundial de la Salud Mental, a las reivindicaciones en defensa de que el cuidado de la salud mental pueda llegar en igualdad de condiciones a todas las personas.

Saúde Mental Feafes Galicia puso el foco sobre una "realidad muy palpable" en el territorio gallego que se intensificó con la pandemia por coronavirus: la dificultad de acceso a los recursos de salud mental que sufrenlos ciudadanos que viven en entornos rurales. Más del 60% de los ayuntamientos de Galicia tienen menos de 10.000 habitantes y 119 cuentan con menos de 2.000 residentes. Esto implica una gran dispersión geográfica y un aislamiento poblacional importante que dificulta el acceso a los recursos especializados.

Así, la población que reside en el rural gallego tiene menos posibilidades de recibir ayuda o acudir a servicios especializados en salud mental debido a que escasean o directamente no existen en su entorno. Esta dificultad se agrava con los problemas de transporte y con el desconocimiento de este tipo de enfermedades por parte de familias y allegados, que en ocasiones lleva a la inacción y al aislamiento de los pacientes. La entidad indica que a todo esto habría que añadir el estigma que existe hacia los problemas de salud mental y al miedo al rechazo que sufren las personas que los padecen.

"Todos estes factores provocan que a maior parte da poboación con problemas de saúde mental que vive no rural estea desatendida, agravando así a súa patoloxía, provocando o seu illamento, limitando a súa participación social, e favorecendo posibles situacións de tensión e estrés na contorna familiar derivados da enorme carga que implican as tarefas de coidados", indica la entidad en un comunicado.

Un programa de apoyo comunitario en el rural

Saúde Mental Feafes Galicia cuenta con un programa de acompañamiento comunitario y atención en el rural para hacer frente a esta problemática. Financiado por las Consellerías de Política Social y Sanidade, la iniciativa busca acercar los servicios de atención a la salud mental a aquellas zonas con especial dificultad de acceso, evitando el aislamiento personal y social de las personas con problemas de salud mental y fomentando su inclusión, así como previniendo situaciones de dependencia.

Una serie de equipos profesionales se desplazan al lugar de residencia de las personas con problemas de salud mental que viven en el rural ofreciendo apoyo en su propio entorno. Estos equipos también realizan un acompañamiento social si es necesario y organizan acciones de promoción de la salud mental comunitaria. Las asociaciones que desarrollan este programa del que se benefician anualmente unas 130 personas son Avelaíña (en las zonas de Ponteareas y A Cañiza), Alume (en la montaña lucense), Fonte da Virxe (en el rural de Santiago de Compostela), Andaina (en Ordes y Oroso) y A Mariña (en A Mariña lucense).

El movimiento asociativo Feafes a nivel estatal lanzó aa campaña A saúde mental, un dereito necesario: mañá podes ser ti con el objetivo de denunciar las desigualdades que existe alrededor de la salud mental y que pueden darse por diferentes motivos, desde razones de sexo, edad, económicas, geográficas o de educación. La entidad sin ánimo de lucro también busca reivindicar la importancia de que la salud mental sea igual para todos los ciudadanos y concienciar a la sociedad de que es algo que afecta a cualquier persona, por lo que es fundamental cuidarla.