La DGT esconde este radar tras un contenedor de basura en su desesperado afán recaudatorio

La DGT (Dirección General de Tráfico) -o sus homólogos de tráfico en las respectivas autonomías- sigue innovando en la instalación de radares y controles de seguridad. Este fin de semana, lo ha hecho de dos maneras, la primera, un radar móvil en un carril en obras en Barcelona; y la segunda, otro radar móvil detrás de un contenedor en una recta. 

El radar en cuestión lo situaron en la Nacional 640 de la Provincia de Pontevedra en dirección Agolada y en una recta, según la imagen capturada -y adjunta en este artículo- por la aplicación Social Drive. De esta forma, el conductor, que no ve el radar móvil, es multado inmediatamente si sobrepasa la velocidad estipulada en la carretera (90 kilómetros por hora). 

La estratagema de la DGT es tan antigua como contundente a la hora de multar: es recurrente la imagen de un vehículo, con un radar móvil, en una rotonda, detrás de un contenedor o escondido en mitad de una autovía. 

Lo que no se había visto jamás es lo que captaron las cámaras de Social Drive este fin de semana en la Ronda Litoral de Barcelona, una de las principales arterias de la ciudad, en una vía de circunvalación que atraviesa el municipio. 

Allí, el Servicio de Tráfico dependiente de la Generalitat, colocó un coche en una zona donde se ejecutaban labores de mantenimiento para captar a los conductores. 

En esa carretera, el límite normal es de 80 km/h, pero, aprovechado los servicios de mantenimiento, la velocidad pasaba a ser de 40 km/h. ¿Resultado? Todos los conductores despistados son multados por ir a más velocidad de la que estipula la vía. 

Y lo hace, además, de manera bastante poco discreta: con un flash cada vez que un coche rebasa la velocidad en ese tramo. En el vídeo que adjuntamos en la noticia se puede ver cómo en poco tiempo multa a cuatro vehículos y tan solo se libra el taxi. 

El vídeo fue grabado en la noche del viernes 4 al sábado 5 de septiembre.