Abdelkader murió de una puñalada en el corazón en Murcia cuando iba a por una deuda de drogas

En la calle Santa Obdulia de La Unión hubo tal 'ensalada' de puñaladas esta madrugada que los vecinos de este municipio murciano todavía no se han recuperado. De por medio había supuestamente temas de drogas y una deuda económica. La suma de estos dos factores dio como resultado una brutal reyerta, entre tres ciudadanos marroquíes, que se saldó con un muerto y dos heridos graves. La víctima mortal, según indican fuentes próximas de la investigación a EL ESPAÑOL, se llama Abdelkader Dib, de 38 años: "un viejo conocido" de la Policía Local y de la Guardia Civil por sus antecedentes.

Pasaban exactamente dos minutos de la una de la madrugada de este domingo, cuando se rompió la tranquilidad de La Unión: un municipio murciano de 20.536 habitantes, conocido por el Festival Internacional del Cante de las Minas y por su Parque Minero que recuerda su esplendorosa industria subterránea del siglo XIX. Las citadas fuentes confirman a este diario el contenido del preocupante aviso que puso en alerta a la Policía Local: "A la 1.02 horas, se informa de una riña entre marroquíes que portaban armas blancas".

Los contendientes eran tres, todos ellos equipados con cuchillos de cocina y navajas y con un historial turbio a sus espaldas: "Los implicados son delincuentes habituales, vinculados a delitos de violencia de género, tráfico de seres humanos y drogas". De un lado, Mounir, de 44 años, y Abdelkader, de 38 años, ambos marroquíes, con antecedentes por supuestos ilícitos contra la seguridad vial, amenazas, riñas y tráfico de drogas. Por otro lado, Abdelaziz, de 41 años, que okupa una casa en planta baja, situada en el número 13 de la calle Santa Obdulia, y cuyo currículo delictivo incluye presuntos delitos de amenazas, de tráfico y riñas.

"El supuesto origen de la reyerta es el tráfico de drogas y una deuda: se supone que Mounir y Abdelkader fueron a la casa de Abdelaziz a pedirle una cantidad económica que no ha trascendido". De las palabras pasaron a la violencia, esgrimiendo armas blancas con las que protagonizaron una sangrienta reyerta que causó pavor entre los vecinos. De hecho, el Centro de Coordinación de Emergencias recibió varias llamadas alertando de que se oían ruidos, rotura de cristales y dos ciudadanos deambulaban sangrando por la vía pública.

En la calle Santa Obdulia se personaron cuatro efectivos de la Policía Local de La Unión y se encontraron un panorama dantesco: "Personados los agentes, observan al presunto agresor, agitado, frente a un herido que sangraba por el cuello, al que hay que contener para que no lo agrediese aún malherido". Los policías atajaron el enfrentamiento y uno de ellos entró en la casa para coger una sábana con el objetivo de taponar el corte y detener la fuerte hemorragia que presentaba uno de los contendientes.

Dentro del inmueble, en ese momento, yacía sin vida Abdelkader, tras haber recibido una puñalada certera en el corazón, a manos supuestamente de Abdelaziz: el morador de la casa okupa al que habían ido a cobrarle una presunta deuda relacionada con las drogas y que logró doblegar a los dos 'cobradores del frac' del peligroso mundillo del narcotráfico [Mounir y Abdelkader].

"El fallecido [Abdelkader] se encontraba bocarriba, debajo de una mesa, sosteniendo todavía un cuchillo de grandes dimensiones en sus manos", tal y como precisan las mencionadas fuentes a este diario.

Este domingo por la mañana todavía habían restos de sangre en la calle Santa Obdulia de La Unión. Cedida

Navajazos en la cabeza

En la zona fue movilizada una Unidad Móvil de Emergencias (UME) y una ambulancia del Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP). El personal sanitario movilizado en la calle Santa Obdulia confirma a EL ESPAÑOL que el parte de heridos era terrible: "Uno de ellos llevaba dos pinchazos, el primero, en el muslo, y el segundo, en el abdomen; otro llevaba navajazos en la cabeza, el cuello, la pierna y la mano".

Los médicos no pudieron hacer nada por Abdelkader debido a que la puñalada que recibió fue mortal de necesidad. Sin embargo, los sanitarios sí pudieron estabilizar 'in situ' a Mounir y a Abdelaziz, que presentaban "heridas graves por arma blanca", por las que fueron trasladados de urgencia al Hospital Santa Lucía de Cartagena.

A la una y diez minutos de la madrugada de este domingo, era notificado este terrible suceso en el puesto que la Guardia Civil tiene en la diputación cartagenera de El Albujón. "El escenario se blindó a la espera de la llegada de la Policía Científica para hacer una inspección ocular de la casa". La sangre de la brutal reyerta era visible en el chasis de uno de los turismos que estaba aparcado en la calle Santa Obdulia y sobre el asfalto.

El homicida es conocido

Esta misma madrugada, un equipo de Policía Judicial se personaba en el Hospital Santa Lucía y procedía a la detención del presunto homicida: el okupa Abdelaziz, de 41 años, al que iban a cobrar la supuesta deuda relacionada con el trapicheo de estupefacientes. El arresto de uno de los dos hombres que fue a cobrar el dinero, Mounir, de 44 años, quedó en suspenso, debido a que fue intervenido quirúrgicamente nada más ingresar en el centro hospitalario.

La reyerta ha causado una honda consternación entre los vecinos de La Unión, debido a que el supuesto homicida, Abdelaziz, es conocido en la localidad por ser el padre de un niño pequeño que hace dos años fue sometido a una complicadísima intervención quirúrgica, en un centro hospitalario de Barcelona, para mejorar la grave desviación de columna que padecía, a causa de una escoliosis congénita severa.