Álvaro Prieto, el alumno "ejemplar" de ingeniería y 'pichichi' del Córdoba que murió electrocutado

Álvaro Prieto era un joven “modelo”. Se fue a Sevilla el pasado miércoles para disfrutar de una noche de fiesta junto a sus amigos. El jueves no tenía responsabilidades que asumir: no había universidad y tenía el día libre con su equipo, el Córdoba CF juvenil. Tras la noche en Teatre y la vuelta a Santa Justa, Álvaro desapareció. Después de cuatro días de búsqueda, su cuerpo sin vida apareció en la mañana de este martes entre los vagones de un tren Media Distancia, descubierto por dos reporteros de TVE.

El juvenil del Córdoba CF jugaba en toda la zona alta del mediocampo. Era un extremo rápido, corpulento, por encima de los 1,80 metros, con un buen uno contra uno, relatan fuentes conocedoras de la cantera andaluza. Quienes le conocían futbolísticamente sabían que había arrancado muy bien la temporada. Sus tres goles en cuatro partidos le convertían en el máximo goleador del conjunto califa. En las dos últimas jornadas no estuvo disponible para su técnico, Pedro López. Una lesión lo había apartado de los terrenos de juego.

Llevaba tiempo en las categorías inferiores del Córdoba, aunque anteriormente había pasado por otros equipos de la ciudad. A las órdenes del mismo técnico actuaba desde su etapa cadete y despuntaba ahora, en su tercer año como juvenil y a sus 18 años, en División de Honor, la categoría más alta en la última etapa de formación de jugadores. Fuentes cercanas al equipo tenían claro que podría haber llegado a jugar en el Córdoba B, en Tercera RFEF, la próxima campaña.

[El tren donde ha aparecido el cuerpo de Álvaro Prieto "no se había movido desde el 24 de agosto"]

La consternación en su ciudad era palpable casi en cualquier esquina. En las primeras horas de la tarde, la ciudad deportiva del Córdoba CF era un solar tomado por los pájaros y algunos carteles de la búsqueda de Álvaro aún estaban en las paredes. El club se ha volcado en la búsqueda de su jugador.

En la estación a la que debió haber llegado aquella trágica mañana del 12 de octubre, un seguridad comentaba lo ocurrido con la limpiadora. No daban crédito a lo que estaba pasando. No conseguían imaginarse qué sucedió.

Álvaro es hijo de una conocida jurista de la ciudad. Creció en el seno de una familia tradicional, en una zona acomodada de la capital cordobesa. No nació en Córdoba, sino en Rusia, pero fue adoptado a los cuatro años. En su entorno reflejaban la consternación por un niño que tenía un futuro prometedor.

Sus etapas escolares las pasó en Las Esclavas. En su capilla se reunieron cientos de compañeros el domingo para rezar por él. Era su primer año como estudiante de Ingeniería Mecánica en la Universidad de Córdoba. Un estudiante "ejemplar", relataron quienes le conocieron. La universidad cordobesa emitió un comunicado lamentando lo ocurrido. Este martes se guardará allí un respetuoso minuto de silencio en su memoria y se han decretado tres días de luto.

La hermandad de Nuestro Padre Jesús de la Sentencia y María Santísima de Gracia y Amparo de Córdoba también mostraban sus condolencias a su hermano. "Elevamos oraciones a los que siempre serán sus Sagrados Titulares, por su eterno descanso y el consuelo de su familia y amigos". 

Aún se desconoce qué ocurrirá con su equipo. El pasado domingo quedó suspendido el encuentro que debía disputar ante el Calavera CF, uno de los históricos de Sevilla, que juega precisamente muy cerca del lugar donde desapareció el juvenil. La próxima jornada de la División de Honor juvenil enfrenta al Córdoba con el Xerez Deportivo FC. El club xerecista se ha puesto a disposición de la entidad blanquiverde para todo aquello que requieran. En coordinación con la Real Federación Española de Fútbol, decidirán qué ocurre en los próximos días.

Los aficionados del Córdoba CF despidieron a su jugador en la tarde noche de ayer a las puertas del Arcángel, estadio donde disputa sus partidos el primer equipo. Cantaron el himno del club para que se escuchara "en el tercer anillo". 

Desaparción

La desaparición de Álvaro Prieto se conoció el pasado jueves 12 de octubre. El Córdoba CF y la asociación SOS Desaparecidos daban la voz de alerta por la desaparición del juvenil.

En las primeras horas se conocía que el futbolista verdiblanco había llegado casi sin batería a la estación sevillana de Santa Justa para coger un tren Media Distancia que le llevara a Córdoba Central. No se pudo montar en el tren al no poder demostrar que llevaba el billete en el móvil por carecer de batería en su teléfono. Venía de una noche de fiesta con sus amigos.

[El último mensaje de Álvaro Prieto a su madre antes de desaparecer en la estación de Sevilla]

Horas después, ante la desesperación por volver a su ciudad lo más rápido posible, sin dinero y sin batería en el móvil, trató de colarse en un AVE con destino a la estación de Barcelona Sants. La seguridad sevillana paró su intentó y él pasó, incluso, por la pequeña comisaría que hay en el interior de la estación. 

Momentos después se le vio salir de la estación por una de las tres entradas que tiene Santa Justa. En este caso, por la que da a la avenida de Kansas City. 

Ahí se le perdió la pista al joven futbolista en torno a las 10.30 de la mañana, cuando le vio la último testigo en una zona cercana a las vías, pero alejada de la estación.

Hipótesis

El pasado viernes la familia del joven ya declinaba hacer nuevas declaraciones de lo ocurrido por consejo de la Policía Nacional. Los investigadores estuvieron todo el fin de semana afinando la búsqueda. Este domingo por la noche, Sevilla presenciaba cómo los perros de rastreo se agolpaban en las vías cercanas al Polígono de San Pablo. 

La mañana de este lunes, dos reporteros de RTVE se encontraban, durante un directo, lo que podía ser el cadáver de Álvaro. Las imágenes enseñaban las zapatillas y vestimenta similar a la que portaba el joven. El tren estaba moviéndose sin pasajeros en ese momento: llevaba sin circular desde el pasado 24 de agosto, cuando arrolló un tractor.

A lo largo de la tarde comenzaban a propiciarse distintos bulos en redes sociales. Por Whatsapp se compartían capturas de pantalla en las que se apuntaba a un posible crimen pasional como causa de lo ocurrido. En Twitter también era compartido.

Mientras tanto, en Sevilla los investigadores continuaban con sus labores. La principal hipótesis es que el joven murió electrocutado el mismo día de su desaparición, de ahí que el cadáver no presentara pelo y las manos estuvieran negras. La autopsia revelará más datos sobre lo ocurrido.