Crítica: ‘Sin novedad’, una divertida comedia española donde "no pasa nada" con un reparto excepcional

¿Hay algo más aburrido que no hacer nada? Sí, el deber de hacer guardia durante toda la noche. Esto es lo que ocurre en Sin novedad, una versión española creada por Rodrigo Sopeña y Álex Mendíbil que adapta el formato australiano No activity de Trent O'Donnell y Patrick Brammall, y que acaba de estrenar HBO Max en España. 

Desde un primer momento, quedan diferenciadas las tres parejas de protagonistas y dos bandos completamente opuestos, y comienza una noche aparentemente aburrida que acabará siendo un juego de polis y cacos. En el estático terreno de juego, los dos agentes de policía y viejos amigos Alonso (Arturo Valls) y Campillo (Carlos Areces) vigilan desde el coche, engatusando al espectador con su complicidad y manera de picarse, gastándose una broma tras otra. 

Las conversaciones entre ellos no son muy profundas, pero los momentos absurdos que comparten y las situaciones más simples hacen que el lenguaje no verbal resulte más divertido que el diálogo. Poco a poco, su vaivén consigue hacernos reír y aunque haya momentos con menos chispa entre las interacciones con las agentes de la centralita, poco a poco se ganan nuestra confianza. 

La situación mejora todavía más con los personajes secundarios. Entre ellos destacan otros humoristas conocidos como Goyo Jiménez, Miguel Maldonado, Rober Bodegas o Hénar Álvarez, algunos de ellos capaces de aportar cierta frescura a las parejas protagonistas. Es el caso de Henar Álvarez, cuyo personaje interviene en los últimos episodios para hacernos reír en más de una situación junto a Alonso y Campillo.

Al otro lado de la radio, los agentes hablan con sus compañeras de la centralita, las agentes Olivares (Pilar Castro) y Nayara (Adriana Torrebejano). La diferencia de edad que existe entre ambas es notoria y aunque lleven poco tiempo trabajando juntas, la veteranía de Olivares se compenetra a la perfección con la inocencia de Nayara. El espacio que comparten se vuelve algo claustrofóbico en ocasiones, pero un tercer personaje interviene en escena las veces necesarias, compensando esta sensación y generando más cercanía entre ellas.

Sin embargo, entre todos los personajes de la serie, destaca especialmente la pareja de delincuentes. Ellos son Yasmina (Toni Acosta) y Bony (Omar Banana), una sicaria experimentada y un criminal novato que intentan matar el tiempo esperando el cargamento de droga mientras prueban nuevas habilidades con la pistola y se sinceran entre ellos. 

Toni Acosta y Omar Banana, dos de los personajes más divertidos de la serie. HBO Max

Recordando en ocasiones a los criminales que aparecen en Fargo, los dos personajes meten la pata una y otra vez y no son capaces de estar al mismo nivel que otros sicarios de su cartel. Sin embargo, sus maneras de comportarse y sus formas de reaccionar ante los imprevistos acaban siendo tronchantes, formando parte de los momentos más icónicos y de lo que recuerdas al terminar de ver sus episodios.

A partir de un sentido del humor bien traído a nuestro país, Sin novedad se adapta al formato adecuadamente, trasladando a sus personajes a situaciones muy ocurrentes y acercándoles al espectador. Todo el elenco sabe hacernos reír en el momento indicado y destacan los personajes de Toni Acosta y Omar Banana, que sin duda alguna son lo mejor de la serie. 

En mitad de un elenco que cumple con creces la labor de hacernos reír, Bony y Yasmina son los personajes sobresalen, protagonizando las escenas más divertidas y volviendo a confirmar que Omar Banana es todo un descubrimiento y un talento capaz de hacerse notar en todo lo que hace. Para los protagonistas, la noche parece interminable, pero con el talento de los actores, para nosotros pasará volando.

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