En La Higuera, Bolivia, pasada la una de la tarde del 9 de octubre de 1967, Mario Terán fusiló al Che Guevara con dos ráfagas de disparos. El presidente del país sudamericano, René Barrientos, había dado la orden y, antes de perecer, el guerrillero habría pronunciado esa frase que más de cinco décadas después sigue siendo mítica: "¡Póngase sereno y apunte bien! ¡Va a matar a un hombre!".
La figura del Che es todo un símbolo para la izquierda, que parece haber obviado sus crímenes bajo el paraguas de que el fin justifica los medios. Por eso, cada 9 de octubre, recordando la efeméride de su asesinato, son muchos los que se han acordado de él a través de sus redes sociales, como el vicepresidente Pablo Iglesias o el diputado de Esquerra Republicana de Catalunya, Gabriel Rufián.
Rufián ilustró una fotografía del Che con un fragmento del discurso que Fidel Castro pronunció el 17 de octubre de 1997 para conmemorar el trigésimo aniversario de la muerte del guerrillero. Lo hizo durante un acto celebrado en el monumento dedicado al que había sido su colega de armas, en la ciudad cubana de Santa Clara: "Un combatiente puede morir, pero no sus ideas", exclamó el comandante.
El tuit de Rufián
En el texto original, del que Rufián tomó un fragmento, Castro se preguntaba "qué hacía un hombre del gobierno de Estados Unidos allí donde estaba herido y prisionero el Che, ¿por qué creyeron que matándolo dejaba de existir como combatiente? Ahora no está en La Higuera, pero está en todas partes, donde quiera que haya una causa justa que defender":
Rufián terminaba con el mítico "hasta la victoria siempre" y, suponemos, se pertrechaba para lidiar con el aluvión de zascas que seguramente había previsto. Una vez más sus cálculos no han fallado y Twitter se ha llenado de críticas como estas:
Como es habitual en él, Rufián ha tuiteado nuevamente las críticas que le han parecido más originales.