El actual rector de la Universidad de Vigo, Manuel Reigosa, será el único candidato en las elecciones a la Rectoría que tendrán lugar el 4 de mayo. "Estoy muy satisfecho del equipo, de las líneas de gobierno y de la propuesta que vamos a presentar ante la comunidad universitaria", ha destacado Reigosa, que el pasado mes de noviembre fue proclamado por aclamación como candidato de la formación H2040.

"Es una lástima que no haya más candidaturas", ha concluido el aspirante a la reelección, que ha señalado que la no concurrencia de otras alternativas podría venir motivada porque en "gran parte de la comunidad universitaria" haya un "sentimiento de que las cosas, a pesar de haber sufrido una pandemia, se están haciendo bien", pero también ha apuntado la posibilidad de que exista "un cálculo interesado de promover un voto negativo".

Reigosa ha asegurado que esperaba poder "tener la oportunidad" de contrastar su proyecto para los próximos cuatro años "con otras propuestas que habían surgido de la oposición", a través de la celebración de debates previos a la votación. De ahí que el actual rector haya reconocido que "es una lástima" que no se presentaran otras candidaturas, "especialmente cuando, como hemos visto en sesiones del Claustro, hay personas que legítimamente discrepan de algunas actuaciones del equipo de gobierno", como, por ejemplo, ha señalado, "una mayor inversión en contrataciones".

Mayor número de votos a favor que en contra

En los estatutos se prevé, como ha recordado, que "en el caso de candidatura única, esta tiene que conseguir mayor número de votos a favor que en contra". Esto implica, ha añadido, que "siendo único el candidato, es posible rechazarlo".

"Puede haber un cálculo interesado de promover un voto negativo, sin dar la cara, esperando además que la movilización del voto positivo sea más difícil al no haber alternativa". Ante esta posibilidad, Reigosa ha sostenido que "sería triste que esta hubiese sido la razón" de la falta de otra candidatura, porque "al final, dejaría a la institución de cierta debilidad si el voto negativo es muy numeroso". De ahí que haya asegurado que tiene delante "un reto muy importante, el de conseguir que la gente vaya a las urnas el día 4 de mayo".