Los movimientos de tierra y los temporales del pasado invierno dejaron a la vista el emisario de Samil, una tubería subterránea que sirve para evacuar las aguas fecales de la depuradora del Lagares y que actualmente está inoperativa. El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha explicado este miércoles que desde el Concello lo quieren "retirar", ya que "estéticamente no queda bien".

Caballero ha denunciado no haber obtenido respuesta de las instituciones relacionadas con la obra. Según el regidor, se contactó hace meses con la Autoridad Portuaria (concretamente, dice que en febrero) y Augas de Galicia (en diciembre) para recibir el aprobado de este proyecto y no hubo contestación. "Son los responsables de que ese emisario no se haya retirado", afirma.

Como recogieron en su momento varios medios, el Concello aprobó en el mes de marzo el proyecto de demolición de la tubería, que se puso en manos de Aqualia, la concesionaria municipal de gestión de las aguas. Con todo, esa retirada no se ha efectuado aún, según el alcalde, por la falta de respuesta de las otras autoridades.

Fuentes del Puerto de Vigo declaran a este periódico que se pusieron en contacto con Costas hace aproximadamente un mes para tratar la cuestión y comunicarles que estaba todo bien en el proyecto. "No hay ningún problema al respecto", reponen desde el Puerto.

Abel Caballero ha sido firme en sus declaraciones de hoy y ha afirmado que es un ejemplo de la Xunta "contra la ciudad", además de criticar que la Autoridad Portuaria está "descabezada" desde la marcha de Almuiña. Desde el Puerto confirman que han recibido su solicitud, que se responderá a la mayor brevedad posible.

La Xunta aclara que no tiene competencias sobre el emisario

Tras las declaraciones del regidor vigués, desde la Xunta de Galicia aclaran que "la administración competente para autorizar la actuación municipal es el Gobierno central a través de su Servicio Provincial de Costas en Pontevedra". Por tanto, niegan que Augas de Galicia, dependiente del organismo autonómico, tenga competencia sobre la zona en la que está prevista la obra del emisario.

"Se trata de una gestión del dominio público marítimo-terrestre, por lo que el Concello deberá dirigirse a la administración correspondiente", expone la Xunta.