El Concello de Vigo ya decidió el pasado año mover la celebración del Día de Galicia del 25 de julio al 12 de agosto, alegando como motivo las altas temperaturas. Se registraba por aquella época unas máximas de 25 grados en la ciudad. Lo que parecía un hecho puntual, sin embargo, se ha repetido este año con el pretexto de querer "alejar" el evento del periodo electoral, con la diferencia que esta vez desde el Consistorio no se ha programado una nueva fecha.

En el mes de julio el Ayuntamiento declaraba que en las "próximas semanas" anunciaría el día exacto del Día de Galicia en Vigo y lo emplazaba para mes de septiembre. Tiempo después, y con septiembre a punto de concluir, la efeméride sigue sin tener sitio en el calendario, algo que no ha pasado por alto para los grupos de la oposición.

El portavoz del BNG vigués, Xabier Pérez Igrexas, critica que el cambio de fechas no fue informado "nin moito menos consultado" con la Xunta de Portavoces y tilda el episodio como uno "máis da degradación e utilización sectaria que se fai por parte da Alcaldía dos actos institucionais". El nacionalista resalta que estos actos son "de toda a cidade" y "non apenas do Gobierno municipal".

"Desde logo no BNG non queremos pensar que por vez primeira en moitos anos, descontando a paréntese forzosa da pandemia, o Concello de Vigo non vaia realizar ningún acto institucional polo día no que celebramos na maior cidade de Galiza o orgullo da nosa identidade como pobo e nación, o orgullo de sermos galegas e galegos", afirma Igrexas.

También han afeado el asunto al Concello desde el Partido Popular, que reclama conocer la nueva fecha. Su portavoz, Miguel Martín, resalta que la decisión de posponer la celebración por las elecciones del 23 de julio era "inxustificada", "unilateral" y "unha absoluta falta de consideración a Galicia e os galegos", así como "unha falta de respeto institucional". "En Vigo parece que rexe un calendario distinto que só atende aos intereses particulares e electorais do señor Caballero", subraya.