Este domingo se cumplían 10 días de la desaparición de Bimba, una perrita yorkshire de 12 años, que se encontraba con su familia en Saiáns (Vigo). El animal, de tamaño mediano y calificado por sus dueños como muy "tranquilo y cariñoso", se perdía en la Parroquia de San Xurxo, dejando a su familia muy preocupada desde entonces, aunque con la esperanza de poder encontrarlo.

Esta medianoche se producía el "milagro", cuando desde una clínica veterinaria de Bouzas contactaban con los dueños de Bimba. La perra se encontraba sana y salva gracias a una familia de Vigo que se había percatado de su presencia en una finca de su propiedad en la zona de Patos (Nigrán). "Ellos no viven allí pero fueron el fin de semana y se dieron cuenta de que Bimba estaba en la finca", explica Carolina Betancort, dueña de la perra.

Los propietarios del terreno, al comprobar que había heces del animal, dedujeron que llevaba allí varios días. "Bimba es muy de meterse en el coche, y cuando la familia llegó se les metió dentro. Fue entonces cuando ellos decidieron llevarla a una clínica veterinaria 24 horas para comprobar si tenía chip", añade Carolina. Fue entonces cuando desde la clínica contactaron con su marido y esta madrugada ambos trajeron de nuevo a Bimba a casa: "Fue un milagro", dice llena de felicidad.

Cuando Bimba vio a sus dueños corrió a junto de ellos: "Primero fue a junto de mi marido. Tiene debilidad por él", reconoce Carolina. "Ella estaba toda ‘happy’ como si no hubiera pasado nada", añade.

En las últimas horas y tras ser examinada por los mismos veterinarios, la familia de Bimba aprovechó para bañarla y acicalarla. Ahora duerme tranquila después de una aventura que, por suerte, tuvo un final feliz para ella.