Las medidas que ultima el Gobierno con la Banca para aliviar los sobrecostes derivados de la subida del euríbor podrían beneficiar a 160.000 hipotecas activas a tipo variable en Castilla y León, según datos aproximados de Adicae, dado que el resto hasta las 230.000 que están operativas, están firmadas a tipo fijo.
El principal índice de referencia de los préstamos hipotecarios, el euríbor, no ha dejado de escalar hasta cerrar hoy en un 2,847%, lo que encarecerá más fuertemente aquellos créditos solicitados en el último lustro debido a que es en los primeros años de hipoteca en los que más intereses se paga a la entidad bancaria.
Estas medidas, que serán de adhesión voluntaria por parte de las entidades financieras con aplicación a partir del 1 de enero de 2023, pretenden ayudar a las familias que suscribieron en su día una hipoteca a tipo variable y se van a encontrar con revisiones que pueden suponerles un incremento desorbitado en su cuota mensual.
Así, para una hipoteca media de 150.000 euros a 25 años a tipo variable con un euríbor +1,5%, el incremento sería de entre 230 a 250 euros más al mes a pagar, según datos de Idealista. Una situación que, sumada a la pérdida de poder adquisitivo por la elevada inflación, podría poner contra las cuerdas el sistema con una oleada de impagos.
A estas ayudas anunciadas por el Gobierno podrán acceder todos aquellos hipotecados con ingresos no superiores a 3,5 veces el IPREM (29.400 euros brutos anuales) y cuya cuota mensual a pagar sea superior al 30% de los ingresos del titular además de haber experimentado un incremento de al menos el 20% sobre lo que pagaba hace un año.
Un paquete de medidas que, según ha explicado la ministra de Economía, Nadia Calviño, incluye, además, eliminar los costes derivados de aquellos que han decidido pasar su préstamo de tipo variable a tipo fijo así como los que se generen por amortizar capital durante 2023.
Sin embargo, la Asociación de Usuarios de Bancos y Cajas de Castilla y León (Adicae), advierte de la letra pequeña de este anuncio dado que será "el usuario el que asumirá los costes de alargar el número de años para pagar ese crédito porque a la larga pagará más intereses a la entidad financiera, aunque ahora pueda ver reducida su cuota mensual".
Además, inciden en el error de dejar fuera a los que tienen una hipoteca a tipo fijo que "también tienen riesgo" de verse sobreendeudados y no poder hacer frente a los pagos.