A pesar de estar ya en campaña electoral para que los españoles votemos a nuestros candidatos al Parlamento Europeo todos los mensajes que escuchamos estos días son de corte nacional, nada de lo que se escucha nos permite averiguar que es lo que vamos a votar el próximo 9 de junio.

El debate es netamente nacional, durante esta semana las noticias han seguido siendo sobre el proceso judicial abierto contra Begoña Gómez, esposa del Presidente del Gobierno, sobre el reconocimiento y la declaración del Estado de Palestina y sobre el escarnio de la aprobación de la Ley de Amnistía en el Congreso de los Diputados…..

720 eurodiputados invisibles

Ni una palabra de lo que concierne a la elección de 61 eurodiputados, que son dos más que en la anterior legislatura y que irán a Bruselas a representar los intereses de los españoles en un Parlamento integrado por 720 miembros.

No se escucha a los candidatos hablar de Europa, ni si quiera cuando celebran actos de partido en el marco de la campaña electoral lo hacen. Están viniendo por Castilla y León responsables de los dos grandes partidos y sus mensajes son todo el tiempo, nacionales.

Es realmente frustrante darse cuenta de que los ciudadanos no pueden conocer el papel de las Instituciones Europeas porque poco se sabe de ellas. Cuando han tenido la oportunidad de jugar un papel destacado no lo han hecho y me vienen a la cabeza los sucesos más graves que hemos vivido en los últimos tiempos con la pandemia del COVID a la cabeza y no hubo ninguna respuesta organizada y coordinada en la adquisición de vacunas. Si la Comisión Europea hubiera hecho su trabajo tenía que haber coordinado todas las acciones desarrolladas en los 27 países pertenecientes a la UE, para realizar una adquisición ordenada de todo lo necesario para combatir la pandemia. Nada funcionó.

La UE y la seguridad: un fracaso coordinado 

Tampoco la UE supo dar respuesta cuando se produjeron los ataques de células islamistas que cometieron atentados en diferentes países de la UE provocando muertos en ataques a diferentes ciudades, como el que se produjo en Barcelona con una furgoneta que irrumpió en las ramblas de esta ciudad, provocando 15 muertos, lo que demuestra que no existe una política de defensa y de seguridad de la UE.

Resultaría de extraordinaria utilidad que los europeos conociéramos cuál es el papel que juegan las Instituciones Europeas, ya que en teoría el Parlamento debería de legislar sobre las cuestiones que afectan a nuestro territorio y probablemente sea uno de los papeles que en mayor medida desarrolla y nos inunda con directivas y Decisiones que tenemos que incorporar a nuestro ordenamiento jurídico y que en la inmensa mayoría de los casos lo hacemos siempre tarde teniendo que aplicarse sin la adaptación pertinente a nuestro sistema jurídico.

El Parlamento Europeo elige al Presidente de la Comisión Europea, que en realidad se ha convertido en un mero portavoz de los asuntos europeos y que no desarrolla para nada las funciones que debería de ejercer un presidente tal y como lo conocemos. No lleva el impulso de las políticas a desarrollar, ni tampoco toma las riendas de la gestión de los temas que interesan a Europa y que necesitan soluciones decididas. No tiene el reconocimiento de los Estados para desarrollar este papel y por lo tanto no lo puede hacerlo.

Manifestaciones agrarias y la inoperancia de la UE

Hemos asistido a comienzos de este año a las manifestaciones de los agricultores en diferentes países de Europa, incluida España reivindicando soluciones para el drama que vive el campo, en el que fallan las políticas agrarias: no hay incorporación de jóvenes, el sector está completamente envejecido, no pueden cultivar lo que es más rentable porque se marcan que cultivos tienen ayudas, no pueden utilizar determinadas materias activas para defender de las plagas sus cosechas porque a veces se prima una absurda protección medioambiental…. No ha habido ninguna respuesta.

Tengo un ejemplo muy bueno de la inoperancia europea que se ha dado en Castilla y León y que es el del lobo, ante un problema grave como es la excesiva presencia de esta especie y que constituye una amenaza para la ganadería, y no solo este problema histórico no se ha resuelto en Bruselas, sino que se ha agravado por la decisión adoptada por la ministra Ribera, ahora cabeza de lista del PSOE a las europeas.

El desconocimiento de la realidad de esta especie en Castilla y León llevo a la ministra a prohibir su caza selectiva en todo el territorio de la Comunidad, y a declararla especialmente protegida. Los ataques de lobo a la ganadería generan verdaderos destrozos en las explotaciones que los ganaderos tienen que aguantar estoicamente. No pude asumirse por los ganaderos y muchos acaban cerrando sus explotaciones.

Me refiero a este problema con detenimiento porque es un buen ejemplo de como se tratan los problemas en Europa, se dejan ahí aparcados y no se resuelven, se pasan los años y el problema sigue siendo el mismo e incluso se puede ver agravado por decisiones nacionales. Esto es lo que pasa en buena medida en Europa, que se ha convertido en una enorme maquinaria muy burocratizada alejada de la realidad de los países y de la que no derivan soluciones para los problemas de los ciudadanos.

El Euro y la economía

Es muy difícil que los europeos sepamos para que sirve Europa más allá de tener una moneda única y criterios de asunción de déficit por los Estados, ya que fue una de las decisiones más importantes que se adoptaron después de la crisis financiera de 2010 y que al menos puede haber servido para generar un cierto control del gasto público. Ahora también no sé si nos coloca en una posición muy ventajosa con respecto a los criterios que siguen en este sentido otras grandes potencias del mundo como EEUU en las que la emisión de dinero es absolutamente discrecional. Probablemente este seria otro debate.

Ahora toca ir a votar a nuestros candidatos europeos el próximo día 9 de junio, y yo la verdad es que hasta la fecha no he sido capaz de diferenciar las propuestas que nos hacen unos y otros partidos. Tengo la impresión de que buscan un plebiscito nacional, conocer que quieren los españoles para España y estas elecciones no van de eso. Se trata de elegir para Europa y para que se tomen decisiones europeas que nos beneficien en nuestra posición en el mundo, pero vivimos un tiempo en el que todo se mezcla, se enreda, se pasa de pantalla y no se pone el foco durante más de un breve lapso de tiempo, lo que impide centrar los temas dónde deberían estar.