PP y Vox aprueban las cuentas de tres consejerías sin aceptar ninguna enmienda de la oposición

El pleno monográfico de presupuestos arrancó con el cierre de filas de PP y Vox para rechazar todas las enmiendas de la oposición, de manera que se aprobaron durante la mañana el articulado y las cuentas de las consejerías de la Presidencia, Economía y Hacienda y Agricultura, que suman 1.284 millones de los 11.262 millones asignados a los diez departamentos de la Junta.

Como es habitual, la sesión comenzó con la presentación del proyecto de ley de presupuestos por parte del consejero de Economía y Hacienda. Carlos Fernández Carriedo reclamó a los procuradores de las Cortes un “sí” para unas cuentas de 13.809 millones, un 12,35 por ciento más que el último, y el mayor de la historia de la Comunidad.

“Nosotros vemos Castilla y León en positivo”, manifestó Fernández Carriedo, mientras que la socialista Rosa Rubio mandó de entrada los presupuestos “a corrales” porque consideró que “nacen muertos” ante un cuadro macroecómico, con un crecimiento estimado de 1,6 por ciento, que estimó superado cuando el propio consejero, que sí reconoció un deterioro en los datos, ha hablado de recesión. 

En su réplica, el popular Ángel Ibáñez sostuvo que el PSOE pone “el ruido” y “las nueces” corren a cargo del presupuesto y afeó a la oposición enmiendas de mínimos, que cuentan con mayor dotación en los presupuestos, que calificó de “comprometidos con esta tierra”.

Así, todas las enmiendas de la oposición decayeron bien por “estar fuera de la realidad” o por su encaje técnico. “Son excusas vagas, desdeñan las enmiendas de la oposición por el hecho de ser de la oposición”, censuró Pablo Fernández (Podemos), convencido de que PP y Vox son un ejemplo del camarote de los hermanos Marx y su frase de “estos son mis principios y sí no les gustan tengo otros”. 

Para los procuradores ‘populares’ y de Vox, que dieron réplica a las enmiendas, se trata de un “buen presupuesto”, el más elevado de la historia de la Comunidad y centrado en las personas, mejora de los servicios públicos, con menos impuestos y programas para la dinamización económica de Castilla y León.

Sin embargo, el debate se salió del guión cuando Francisco Igea se quejó de ser interrumpido por Raúl de la Hoz (PP) y pidió la protección del presidente. Carlos Pollán intervino para pedir “a todos” que respetaran los tiempos de intervención de cada orador. 

La socialista Rosa Rubio también se dirigió al vicepresidente de la Junta, sentado en su escaño pero sin intervención en el debate, para afearle que se riera cuando hablaba de la fuga de jóvenes de la Comunidad. “Siga riéndose, mientras los jóvenes se van”, espetó a Juan García-Gallardo.

También, se coló en el debate la situación nacional con el enfrentamiento por la falta de renovación de los órganos del poder judicial. La popular Paloma Vallejo valoró que el Tribunal Constitucional haya dicho a Pedro Sánchez que “no todo vale”. Se unió después a esa crítica al Gobierno Javier Teira (Vox), que habló de “traición a la patria” y mencionó al ingeniero agrónomo Lisenko sobre las políticas marxistas de Podemos. 

“Pierdan toda esperanza”, advirtió Teira en relación a que los socios puedan asumir enmiendas de la oposición, en una frase que personificó intervenciones de los procuradores de PP y Vox que le habían precedido. 

Reto demográfico

Un día después de que el padrón municipal a 1 de enero de 2022 haya reflejado la pérdida de más de 14.000 habitantes en Castilla y León, Rubio defendió un programa de reto demográfico de 123 millones, que Ángel Ibáñez desdeño al manifestar que los presupuestos ya destinan casi 1.700 millones en diez ejes y 566 medidas desgranadas en todas las consejerías. 

Tanto los procuradores de UPL y como los de Soria Ya, aliados en un mismo grupo, se refirieron a la pérdida de población que sufren tanto las tres provincias del Oeste (León, Zamora y Salamanca) como Soria. El soriano Ángel Ceña, que se estrena en este debate, sentenció que “debe saberse” que la Junta se opone a implementar las ayudas al funcionamiento.

Leonesistas y sorianos desgranaron enmiendas específicas para sus territorios, a lo que los populares Paloma Vallejo y David Beltrán respondieron que lo que va bien a una provincia beneficia al resto y con lo recogido en el Estatuto sobre la representación de los procuradores. Sin embargo, José Ramón García (UPL) entró en el debate territorial con el artículo 2 de la Constitución sobre nacionalidades y regiones. 

Precisamente, Juan Antonio Palomar (Soria Ya) lamentó que PP y Vox no les hayan respondido cuando les pidieron que les mandaran las que consideraban como enmiendas prioritarias. 

Las sucesivas votaciones de la enmiendas y las secciones se desarrollaron de acuerdo a lo previsto, salvo en la sección de Economía y Hacienda, que recibió 42 votos a favor, al optar de forma errónea por el ‘no’ la ‘popular’ María Ángeles García y Javier Bernardo Teira, de Vox.