Tomás y el Bar Restaurante El Archivo de Simancas
Un famoso bar con más de 30 años de historia en un conocido pueblo vallisoletano: brilla con sus torreznos, oreja y un café exquisito
Tomás está al mando de un establecimiento hostelero que también brilla gracias al sabor de unos torreznos que quitan el sentido y de una oreja riquísima
8 septiembre, 2024 07:00Noticias relacionadas
Simancas es un municipio vallisoletano que se ubica en la zona central de la provincia de Valladolid y que pertenece a la Comarca de Campiña del Pisuerga, a una altitud de 720 metros sobre el nivel del mar. En la actualidad, y según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) cuenta con una población de 5.493 personas.
Se sitúa a tan solo 10 kilómetros de distancia de la capital. Desde ésta, podemos acceder a nuestra localidad a través del camino Viejo de Simancas, cruzando el puente románico del pueblo. La comunicación por carretera más usual, sin pasar por la capital, se realiza a través de la A-62.
Simancas fue una zona de frontera durante la Edad Media entre los reinos cristianos del Norte y los musulmanes que dominaban la Península. Tras la conquista de Toledo en el siglo XI, por parte de Alfonso VI, la localidad quedó integrada dentro de la villa de Valladolid. La leyenda cuenta que siete de las mujeres de la villa se negaron a pagar tributo al califa de Córdoba y se cortaron las manos sin dudar.
En la actualidad, en el municipio pucelano se encuentra un establecimiento hostelero que cuenta con años de historia y que brilla en el lugar. Se trata del Bar-Restaurante El Archivo de Simancas.
Al frente del mismo está, desde hace 32 años, Tomás Domínguez Cabornero. Un simanquino de 46 años, de los de toda la vida, que lleva al frente del negocio 32 años, ni más ni menos.
De cafetería-churrería a bar-restaurante
“Soy un simanquino de pura cepa. Nacido y criado en el pueblo allá por el año 1978. Me considero una persona extrovertida y amante de lo que hago y disfruto sacando adelante mi negocio cada día desde hace ya 32 años”, asegura nuestro entrevistado, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León.
El lugar contaba con actividad ya desde “la década de los 60 del siglo pasado” y “era en sus inicios una cafetería-churrería” hasta que la familia de Tomás comenzó a explotar el mismo allá por año 1992 para convertirlo en restaurante un año después.
“Aunque el lugar tenga más de 60 años de vida y el Bar-Restaurante El Archivo 32, yo no cojo las riendas hasta después de la pandemia del coronavirus que es cuando mis padres se jubilan”, añade nuestro protagonista.
Tomás cogió el legado de sus padres para dar continuidad al negocio familiar.
El Bar Restaurante El Archivo de Simancas
Torreznos y el “mejor café de la comarca”
La ubicación de este establecimiento hostelero es ideal. Está junto al archivo de Simancas. Cuenta con un aparcamiento en la puerta y un acceso inmejorable desde la A-62. En la actualidad, nuestro entrevistado, solo, saca adelante el negocio debido a la subida de los costes que le han obligado a “apretarse el cinturón”, apunta.
“Ofrecemos el mejor café de la comarca y una amplia variedad de tapas y raciones. Nuestra especialidad es, sin duda, los torreznos. Típicos vallisoletanos y sin ningún tipo de preparación que altere lo que son por sí mismos”, añade nuestro protagonista.
Al cliente le encanta la amplia variedad de productos que ofrece el negocio simanquino y Tomás también recomienda que prueben la oreja. Productos y platos que quitan el sentido al comensal y que enamoran desde tierras simanquinas.
Imagen del Bar-Restaurante El Archivo de Simancas
El futuro
“Veo el futuro, siendo sincero, incierto. No hay un relevo generacional en los clientes, los productos suben y no se puede repercutir dicho incremento en nuestros precios, lo que ha provocado una disminución considerable del beneficio”, apunta nuestro entrevistado cuando le preguntamos por cómo ve el futuro.
Tomás espera al futuro para ver su devenir. Argumenta que, en estos momentos, sacar un negocio hostelero adelante “es igual de complicado en el medio rural que en las grandes urbes” porque “la hostelería ha cambiado mucho en los últimos años y no precisamente a mejor”.
El dueño del Bar-Restaurante El Archivo de Simancas añade que “todo puede ser y dependerá de la situación general de la economía nacional” pero añade que “el modelo de hostelería actual tiene fecha de caducidad”.
Seguro que Tomás y su negocio tienen una larga vida aún.
Tomás en su negocio
