Jóvenes del Centro Menesiano se inician en el piragüismo
Un grupo de doce adolescentes pertenecientes al Área de Protección y Reforma del Centro Menesiano Zamora Joven han compartido dos jornadas de actividad con el equipo de piragüismo AD Zamora-Iberdrola durante los dos últimos fines de semana de mayo.
Durante dichas jornadas, los participantes, de entre 14 y 18 años, han podido iniciarse en la actividad del paleo, y navegar por las zonas que el alto caudal del Duero les ha permitido. A lo largo de la última década, muchos han sido los adolescentes integrados en los distintos programas del Centro Menesiano Zamora Joven que se han iniciado en la actividad de piragüismo gracias a la colaboración de AD Zamora-Iberdrola.
Dentro de este grupo en concreto, varios fueron los chicos y chicas que aprendieron a remar el pasado verano dentro del programa municipal ‘Educación de Calle’ al estar Centro Menesiano incluido junto con Cruz Roja y el Ayuntamiento de Zamora.
Justino Santiago Fernández, director del centro Menesiano ZamoraJoven, valora la importancia de esta actividades: “Nuestra manera de trabajar con estos jóvenes - tanto en programas de Protección, como en Reforma, en Centro de Día o en el Hogar de Socialización - es la de normalizar su situación al no poder estar con sus familias por tener que cumplir una medida judicial. Lo más importante para nosotros es que nuestros jóvenes tengan las mismas oportunidades que el resto. Queremos enfocar su tiempo libre hacia actividades de ocio saludable relacionadas con el deporte: paseo, montaña, entre otras”.
Santiago Fernández destaca que “son actividades que pueden resultar físicamente exigentes pero les divierten, les desconectan de otras situaciones que viven, y rompen con sus rutinas. Durante el presente curso estamos apostando mucho por actividades lúdicas físicamente fuertes. En concreto, las actividades de piragüismo son un reto para ellos. El río, o la actividad en sí, en principio les impone y no son del todo receptivos a ella. Eso nos lleva a planteárselo en forma de desafío, con un toque de aventura. Lo demás lo confiamos a ADZ, muy profesionales y que son quienes controlan todo; y que dan mucha seguridad tanto a nuestros jóvenes como a los educadores que les acompañan.”
Sobre estas dos jornadas en concreto, el director del centro Menesiano añade que “me consta que han disfrutado un montón y estoy especialmente contento de que la mitad de los asistentes hayan sido chicas, porque a veces son más reacias a las actividades deportivas aunque al final siempre acaban compartiéndolas con los chicos.
En este punto interviene el técnico de AD Zamora-Iberdrola y coordinador de estas actividades, José Manuel García, para puntualizar que “dentro de este perfil de adolescentes las inseguridades son muy palpables. Siempre hay asistentes que en un principio no quieren subir a la piragua; pero acaban probando al ver que los demás lo disfrutan, y finalmente son los que no se quieren bajar. Es curioso observar el proceso y la transformación de un adolescente que pasa desde la inseguridad más absoluta a la total confianza y disfrute de la actividad. Son plenamente conscientes de haber vencido a sus miedos y este hecho es algo sobre el que luego me gusta que reflexionen porque es una experiencia muy positiva que van a poder trasladar a cualquier otro ámbito de sus vidas.”
Justino Santiago Fernández añade que “tener a ADZ a nuestro lado durante estos casi diez años supone una puerta que se nos abre en forma de alternativa de ocio. A la vuelta del verano podremos ofrecer a nuestros jóvenes incorporarse a ADZ como una de nuestras posibilidades para su tiempo libre. A partir de ahí nacen el compromiso y la exigencia que suponen el pertenecer a un equipo. Varios chicos pertenecientes a nuestros programas han llegado incluso a competir a nivel nacional con ADZ, y eso ya implica viajar por España, conocer gente, establecer lazos en otras partes; y siempre en un entorno saludable. Tras estas dos jornadas ya hay varios que han preguntado para hacer más actividades con ADZ.”
En cuanto a lo que significan estas actividades para AD Zamora-Iberdrola, su técnico José Manuel García comenta que “es muy gratificante impartir estos talleres; nada que ver con la rutina de un grupo de entrenamiento con sus objetivos deportivos y la presión por los resultados siempre en mente. Esto es justo lo contrario. Desde que llegan los grupos y ayudan a preparar el material ya se percibe el buen ambiente. Durante la actividad surge la conversación y nace una complicidad que nos hace querer que vuelvan más veces. Cuando terminamos, se mezclan por un lado el cansancio por el esfuerzo físico, y por otro la relajación y la paz que aporta el entorno del río, con sus aves, la caída del agua por los azudes... El resultado son esas caras de satisfacción y los agradecimientos mutuos.”
José Manuel García concluye: “Ser útiles y contribuir al bienestar de colectivos como éste nos anima mucho a seguir colaborando con Centro Menesiano y otras entidades de esta manera totalmente desinteresada; gracias a que en el club hay personal dispuesto a ello y gracias al apoyo que el Ayuntamiento nos presta facilitándonos personal, material e instalaciones para todas nuestras colaboraciones.”