Las lentejas es uno de los platos típicos que se acompañan con ajo.

Las lentejas es uno de los platos típicos que se acompañan con ajo.

Nutrición

El ingrediente de las abuelas de España favorito de los médicos: baja el azúcar en sangre

Recuperar este ingrediente tradicional de nuestra gastronomía ayudaría también a prevenir la hipertensión y las enfermedades crónicas.

27 junio, 2024 04:48

La sabiduría popular no siempre acierta, o exagera en exceso las virtudes de los alimentos saludables. Pero en otras ocasiones, los "remedios caseros" de nuestras abuelas han sido confirmados con el paso del tiempo por la ciencia, probando que los valores tradicionales tienen su razón de ser. Y en España, uno de los ejemplos más evidentes es el redescubrimiento del ajo.

El ajo es un excelente sustitutivo de la sal, explicaba la vocal de sanidad del Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de la Comunitat Valenciana (CODiNuCoVa) Maite Navarro. El consumo poblacional de sal "se eleva a más del doble de lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud para los adultos, que es de menos de cinco gramos al día", alertaba, por lo que recomendaba sustituirla "en guisos, salsas, carnes y pescados" por ajo o cebolla.

Ahora, un metaanálisis con 29 ensayos clínicos controlados y aleatorizados subraya los beneficios del consumo regular de ajo. Y es que ya lo dice el refrán, "con pan y ajo crudo se anda seguro". El nuevo trabajo, llevado a cabo por los investigadores de las universidades del Sudeste y Xizang Minzu de China, y publicado en la revista Nutrients, relaciona este aderezo tradicional con niveles más bajos de azúcar en sangre y menor colesterol.

Tanto la glucosa como las moléculas grasas que recorren el organismo son nutrientes clave, necesarios para aportar energía y para una amplia variedad de reacciones metabólicas. Sin embargo, las dietas modernas actuales suelen potenciar los excesos. Esto ha aumentado la incidencia de enfermedades, de la diabetes hasta las dolencias cardiovasculares, incluyendo algunos tipos de cáncer.

"En individuos sanos, el metabolismo de la glucosa y los lípidos está regulado con precisión, pero los trastornos del metabolismo de la glucosa y los lípidos pueden acarrear enfermedades crónicas, aterosclerosis, diabetes y enfermedad del hígado graso", explican los autores. El consumo de ajo, en cambio, se ha asociado a una mejor salud en general, así como a una óptima regulación del metabolismo de los lípidos y el de la glucosa.

Ahora, tras esta gran revisión, los investigadores han confirmado que incluir ajo en la dieta se asociaría con niveles más bajos de glucosa en sangre y un mejor control glucémico a largo plazo. También implica unos mayores niveles de colesterol HDL o "colesterol bueno", y unos menores niveles de colesterol LDL o "colesterol malo". Sin embargo, los niveles de triglicéridos no se verían afectados por el consumo de ajo.

Durante el estudio se tuvieron en cuenta investigaciones con una duración media de entre tres semanas y un año, incluyendo estudios con ajo crudo, extracto de ajo y comprimidos de ajo en polvo. La hipótesis que se baraja es que los diferentes ingredientes bioactivos del ajo podrían ser los responsables de estas mejorías a nivel metabólico, sobre todo en cuanto a la reducción del estrés oxidativo se refiere.

Así mismo, el ajo también contiene un antioxidante conocido como aliína, el cual se ha relacionado con un mejor control de la glucosa y los lípidos en sangre, y también con una mayor diversidad del microbioma intestinal en anteriores estudios. Como ya vienen sugiriendo multitud de investigaciones, nuestra dieta tiene una clara influencia en la salud, para bien y para mal.