España duplica el número de contagios en 15 días mientras aguarda la "explosión" de ómicron
Más de la mitad de los casos en la sexta ola se han producido en las dos últimas semanas.
18 diciembre, 2021 07:52Es probable que a su alrededor usted también lo haya notado. Casi dos años después del inicio de la pandemia parece haber más contagiados de Covid que nunca. Los casos notificados en las últimas dos semanas superan los 250.000, más de la mitad de los 400.748 de la sexta ola, que dio comienzo, según los expertos del Instituto de Salud Carlos III, el pasado 14 de octubre.
Es decir, que en dos semanas ha habido más casos que en las seis anteriores. Y, lo que es más importante, si ya han crecido las hospitalizaciones (más de 11.000) y muertes (casi un millar) en estos dos meses, en los próximos días veremos cómo repercute este repunte de la Covid en España.
A día de hoy es difícil determinar cuánto de este incremento se debe a la variante ómicron, pero los especialistas en Salud Pública no dudan de que su presencia en España es mucho mayor de lo que arrojan las cifras confirmadas: solo medio centenar.
Y es que en estos días no han dejado de aparecer estudios que confirman lo que se sospechaba: esta nueva cepa es mucho más transmisible que delta y el riesgo de reinfección mucho mayor. Concretamente, 5,4 veces mayor, según un estudio elaborado por el Imperial College de Londres con datos de más de 200.000 PCR positivas reportadas a la Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido, y que advierte de que no está claro que esta variante sea más leve.
Paralela a la multiplicación del número de casos va la incidencia acumulada, el marcador más popular, en este 2021, para medir la intensidad de la pandemia. A principios de mes eran unos 250 lo casos que se producían por cada 100.000 habitantes en tan solo dos semanas. Ahora se duplica esa cifra: 511.
Por sí solo, este indicador nos dice que España está en riesgo "muy alto" de Covid, el nivel más alto que establece el semáforo acordado por Gobierno y comunidades autónomas. Esta cifra debe cotejarse con la de hospitalizaciones e ingresos en UCI: el semáforo solo cambia de color si estas van parejas. Y, de momento, van por detrás, pero no hay que bajar la guardia.
El 5,35% de las camas disponibles en los hospitales españoles tienen pacientes Covid en ellas, mientras que en cuidados intensivos lo tienen el 14,03%, ambos parámetros dentro del nivel medio de alerta. Sin embargo, estos no han hecho más que crecer, triplicándose en tan solo un mes. Y eso que todavía no han notado el efecto del aumento de contagios de las últimas dos semanas. En la actualidad hay 6.667pacientes Covid hospitalizados. Hace un mes, eran 2.164.
Todo esto es nivel nacional. Por comunidades, ya hay seis que se encuentran en nivel alto de alerta dibujando una franja roja en el norte de la Península: Castilla y León, País Vasco, La Rioja, Navarra, Aragón y Cataluña. Regiones aledañas, como Asturias, Cantabria, Madrid o la Comunidad Valenciana, se encuentran en riesgo medio. En el Cantábrico, solo Galicia resiste con un nivel de alerta bajo.
Mención especial merecen Navarra y País Vasco, dos comunidades que superan los mil casos de incidencia (en Navarra son más de 1.300). Siguen por debajo del 10% de camas de hospital ocupadas con personas infectadas de Covid, pero sus UCI ya están en el nivel 3 de los 4 de alerta, superando el 20% de ocupación. En este último apartado, en cambio, es Cataluña el único territorio que se sitúa en nivel crítico, con uno de cada cuatro puestos de cuidados intensivos con personas con Covid.
Ómicron se extiende por Europa
Mirando hacia nuestros vecinos europeos, ya no estamos tan lejos de las cifras que nos alarmaban hace unas semanas. Pero un vistazo a aquellos países donde ómicron está más expandida (o se ha detectado más) nos da una idea de lo que nos espera.
Reino Unido ha vuelto a batir un nuevo récord diario de casos: 93.045 este viernes. El ministro de Sanidad, Sajid Javid, calcula en 200.000 los casos de la nueva variante, que ya es predominante en Londres. Ellos han confirmado más de 5.000 casos; nosotros llevamos 51, pero su capacidad de secuenciación es muy superior a la nuestra.
Lo mismo pasa con Dinamarca, un país modélico (tiene más población vacunada que España) cuya incidencia se ha disparado a niveles no vistos hasta ahora en aquellas tierras: más de 1.500 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días. Hasta el momento, más de 3.000 de ellos pertenecen a ómicron. Noruega completa el podio de casos de ómicron detectados, y sus cifras van parejas: 1.166 casos de incidencia.
La agencia europea de salud pública, ECDC, ya ha advertido de que esta nueva variante será dominante en el continente en febrero, sustituyendo a delta. Su anterior predicción, precisamente relativa a esta última cepa, fue plenamente acertada: a finales de agosto, ocupaba casi todo el espectro de nuevos casos.
En España, Madrid ya ha anunciado que el 60% de los nuevos casos en varias áreas sanitarias pertenecen a ómicron. Según Our World In Data, base de datos elaborada por la Universidad de Oxford, supone el 8% del total de casos secuenciados en nuestro país (para confirmar que se trata de dicha variante hay que analizar su genoma, algo que se hace con, aproximadamente, el 7% de los casos detectador por PCR). Es decir, que ómicron tiene todavía un gran potencial de expansión dentro de nuestras fronteras.
Ómicron está dejando de ser una incógnita. Según el último análisis de la Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido, el número de contagios está creciendo a un mayor ritmo que los de delta y, al menos, tan transmisible como esta. Las vacunas y la inmunidad adquirida al pasar la enfermedad con otras variantes no confieren una alta protección frente a contagio, si bien todavía se desconoce frente a enfermedad grave. Pero tampoco es seguro que los síntomas que provoque sean más leves que delta.
Ante esta situación y en previsión de que no toda la población vulnerable esté vacunada con una dosis de refuerzo antes de Nochebuena, ya hay regiones que están moviendo ficha y recuperando medidas que parecían olvidadas. Así, al pasaporte Covid (cuyo valor de protección se reduce si las vacunas no evitan el contagio con ómicron), Cataluña ha anunciado que recupera la cuarentena obligatoria para contactos estrechos. Según la última actualización de la estrategia de vacunación frente a la Covid en España, si estaban vacunados no era necesario que se confinaran.
Los expertos en salud pública lo han avisado desde el principio: una única medida, por muy poderosa que sea, no es una barrera infranqueable en una pandemia. Fiarlo todo a las vacunas o a las mascarillas no deja de ser un salto de fe. Por ello proponen un acercamiento en capas, simbolizado en el modelo de 'queso suizo': las lonchas (medidas contra la Covid) tienen agujeros por los que el virus puede escapar, pero cuantas más superpongamos menos probabilidad tiene para infectarnos o provocarnos una enfermedad grave.
Esta semana se ha añadido una nueva capa: la Agencia Europea del Medicamento ha avalado el uso de Paxlovid, el medicamento oral de Pfizer que impide la enfermedad grave en 9 de cada 10 contagiados, en adultos con alguna condición de riesgo, tales como obesidad o diabetes. El fármaco no va dirigido –al contrario que las vacunas– a la proteína S del virus, por lo que, en teoría, no le afectan la treintena de mutaciones de ómicron.
Esto no es, todavía, la aprobación del medicamento en Europa, sino un mecanismo por el cual los países, cada uno por separado, podrán adquirir el fármaco como medicamento extranjero con la confianza en su calidad y seguridad. Se trata de una 'loncha' más de queso suizo que se añadirá al arsenal de medidas para mantener bajo control un virus que ya dura demasiado tiempo en nuestras vidas.