La nevera en cuestión está pensada para “levantar la moral” de la oficina celebrando “Happy Hours” y fiestas sin tener que preocuparse por los suministros. No seré yo quien sugiera mantenerla cerrada durante el resto de la jornada para evitar que nadie improvise una hora feliz cuando no toca.
Obviamente esta tecnología no sólo sirve para los botellines de cerveza, aunque teniendo en cuenta que ha sido desarrollada por Anheuser-Busch, una de las mayores cerveceras del mundo, se entiende el veto a los refrescos. De hecho, Office Bud-E sólo puede pedir cervezas de la compañía como Budweiser, Gose Island, Bud Light, Blue Point o Green Road.
La nevera inteligente que pide más cerveza sola funciona gracias a la tecnología de Buzz Connect. Office Bud-E integra un ordenador que lleva la cuenta de la cantidad de cervezas que hay en cada momento (tiene una capacidad de hasta 180 botellines) y se encarga de pedir más de forma automática cuando los suministros se están acabando. Todo se controla mediante una app en la que el jefe puede elegir qué bebidas quiere al mismo tiempo que controla la cantidad de cerveza que se consume.
Por el momento Anheuser-Busch tiene pensado instalarla a modo de prueba en oficinas de Nueva York y Chicago (Estados Unidos). Cualquier jefe que lo desee podrá pedir una Office Bud-E a través de un formulario y la cervecera se la cederá de forma gratuita, lo único que tendrán que pagar será la cerveza que se consuma.
También para casa
Si tu jefe no te deja colocarla en la oficina, Anheuser-Busch y Buzz Connect también han desarrollado una nevera inteligente para cerveza pensada para usar en casa. Tiene menos capacidad (78 botellines), pero sigue controlando la temperatura, el inventario y te da la opción de pedir más cerveza de forma automática (aunque también puedes configurarla para ir tu mismo).
La gran diferencia es que está pensada para disfrutar del fútbol americano, por lo que la app tiene funciones extra como avisarte de cuándo va a haber un partido de tu equipo.
Para que luego digan que el futuro no es maravilloso.