En las últimas semanas los perfiles de la familia real griega se ha llenado de idílicos paisajes soleados y aguas azules. El hecho de no reinar en su país no impide que algunos de los royals helenos disfruten de unas vacaciones de lujo en impresionantes yates. Es justamente lo que ha ocurrido con el príncipe Pablo de Grecia (49 años), hijo de Constantino (76) y sobrino por tanto de la reina Sofía (78). El primo griego del rey Felipe (48) se ha relajado con toda su familia a bordo de un yate que, curiosamente, está en venta.
La embarcación pertenece a su suegro, Robert Miller, padre de Marie Chantal (47) y lleva el nombre de su mujer y de su hija, Mari-Cha III. Todo un derroche de lujo y ostentación en un verano que puede ser el único a bordo del exclusivo yate, decorado por el diseñador de interiores John Mundford y que incorpora la última tecnología y cuenta con varios premios a la innovación y al mejor velero de más de 36 metros.
Los tonos claros y la gran cantidad de luz que aportan las estancias son dos de las señas de identidad del interior del barco. Las maderas nobles y el mármol dan el toque de elegancia característico de este tipo de embarcaciones. El Mari-Cha III cuenta con todo tipo de lujos, como bien puede apreciarse en cada una de las habitaciones que componen el interior del exclusivo yate, entre las que destaca una suite y un comedor para 10 personas.
Lo llamativo del caso del Mari-Cha III es que, aunque en la web el yate aparece en venta y existe una forma de contactar con la empresa intermediaria encargada de cerrar la compra, desde ésta aseguran a El ESPAÑOL que la familia acaba de retirar del mercado el yate, algo que ya sucedió en 2014, cuando la embarcación se puso a la venta pero rápidamente se arrepintieron de la decisión.
Vendan o no el velero, lo cierto es que la familia de Pablo de Grecia disfruta de sus vacaciones a bordo del mismo mientras pueden y así lo ha reflejado la propia Marie Chantal en sus redes sociales.
Mientras esperan a que aparezca un comprador, la pareja apura sus últimos días en aguas griegas antes de volver a su rutina en Londres, desde donde partirán a Nueva York, que se convertirá en su próxima residencia. En la gran manzana reside desde hace un tiempo una de las hijas del matrimonio: Olympia de Grecia (20).