El miércoles por la noche, el presidente de Corea del Sur, Moon Jae In, ofreció una cena de gala que tenía a los Reyes de España como principales personalidades invitadas. Un evento en el que la reina Letizia decidió estrenar un vestido de Temperley London, firma favorita de Kate Middleton, valorado en 2.990 euros. Se trata de un traje vaporoso, en tonos pastel, con falda larga, y decorado con coloridos motivos florales que parecían ser un guiño a la tradición floral de Corea del Sur. Como complementos, la monarca escogió unas sandalias negras de Manolo Blahnik valoradas en 725 euros; y una cartera a juego de Magrit de 240 euros (el mismo modelo que lució horas antes). En cuanto a las joyas, a excepción del anillo de Karem Hallam (114 euros), Letizia decidió volver a lucir las mejores piezas de su joyero, y escogió unos pendientes de rubíes y diamantes con forma de paloma y una pulsera a juego.