Los reyes Felipe y Matilde de Bélgica acogerán a refugiados ucranianos en propiedades reales
El palacio real belga ha confirmado que tres propiedades se destinarán a viviendas en abril. Los Reyes están "muy conmovidos" con la invasión.
22 marzo, 2022 13:13Noticias relacionadas
Los reyes de Bélgica, Felipe (61 años) y su esposa, Matilde de Bélgica (49), han emprendido una importante iniciativa solidaria para ayudar a las familias ucranianas víctimas de la invasión de Vladimir Putin (69).
Así, han habilitado tres propiedades de la Familia Real para convertirlas en viviendas y acoger a los refugiados que huyen de la guerra y la atrocidad que está asolando su país.
Cabe recordar que desde Naciones Unidas se estima que más de tres millones de personas han huido de Ucrania desde la invasión rusa hace casi un mes. Si bien la mayoría de los refugiados terminaron en países vecinos como Polonia, Rumania y Moldavia, miles llegaron a países de Europa occidental, incluida Bélgica.
Bélgica espera que alrededor de 200.000 ucranianos busquen refugio en su país, y la Familia Real belga está dando un paso al frente para ayudar.
Según Royal Trust, una organización benéfica creada hace más de un siglo para administrar los activos de la familia real, tres propiedades de la familia estarán disponibles para viviendas para refugiados ucranianos a principios de abril.
Las ubicaciones incluyen dos propiedades en Valonia y Bruselas, y una en Tervuren que anteriormente servía como centro de vacunación. "Estos son alojamientos cuyo propósito original era ponerlos a disposición de las agencias sociales para acomodar a personas de bajos ingresos", ha asegurado Jan Smets, presidente de Royal Trust.
"Esa misión se corresponde bien con lo que deseamos lograr con el Royal Trust. Dada la crisis de refugiados, haremos que estas casas estén disponibles para recepción de emergencia", ha agregado Smets.
El rey Felipe y la reina Matilde, los monarcas belgas, se han reunido con refugiados ucranianos en las últimas dos semanas, visitando un centro de registro de refugiados y un refugio de emergencia.
Un portavoz de la familia real belga ha asegurado, además, que el rey Felipe se sintió conmovido por su experiencia al visitar refugiados en el centro de refugiados de Heysel, y decidió abrir sus propiedades.
Después de visitar el refugio de emergencia el 9 de marzo, el Rey y Matilde publicaron una declaración en solidaridad con los ucranianos y enfatizaron la importancia de acoger a los refugiados.
"La guerra en Ucrania es una crisis humanitaria de una escala no vista en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. La angustia de las familias que conocimos hoy es muy tangible. Sus historias son desgarradoras", escribieron los monarcas belgas, para añadir: "Estamos profundamente conmovidos por la solidaridad de nuestros conciudadanos al recibir refugiados de Ucrania. Expresamos nuestro apoyo al pueblo ucraniano y esperamos que esta guerra termine lo antes posible".
La delicada salud de Paola
A principios de marzo, la reina emérita Paola de Bélgica (84) sufrió una aparatosa caída que la mantendrá en convalecencia durante ocho semanas tras fracturarse el cuello del húmero derecho.
No está previsto que la reina sea operada, indicó el Palacio en un escueto comunicado en el que no dio detalles sobre las circunstancias de la caída, y se limitó a señalar que la soberana suspendía todas sus actividades durante dos meses.
Este percance de salud llega meses después de recibir la vacuna contra la Covid-19. Fue en marzo de 2021 cuando la monarca recibió la primera dosis en su centro correspondiente de Bruselas.
Lo cierto es que la mujer de Alberto II no ha gozado en los últimos años de una buena salud. Sin ir más lejos, en 2018 sufrió un derrame cerebral. Entonces, fue repatriada tras sufrir "un problema de salud" durante una estancia en Italia, si bien su vida no corrió peligro, como indicaron fuentes de la Casa Real.
La consorte de Alberto II fue sometida a exámenes médicos en Bélgica. "Debido a un problema de salud, Su Majestad la Reina Paola será repatriada a Bélgica durante el día para seguir exámenes médicos", indicó la Casa Real en un comunicado, sin mencionar el derrame.
Si bien la radiotelevisión francófona belga RTBF aseguró que Paola había sufrido un derrame cerebral durante una estancia en Venecia, pero desde el Palacio Real no confirmaron el diagnóstico. En estos últimos años, la reina Paola ya tuvo que superar varios problemas de salud.
En septiembre de 2015 la consorte de Alberto II, quien abdicó en 2013, ya tuvo que mantener un periodo de reposo y la Casa Real anunció más adelante que sufría una arritmia cardíaca. También padece osteoporosis y ha sufrido fracturas de una vértebra en 2016 y de la cadera en 2017.
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